Un ferry que encalló frente al sureste de Suecia estaba derramando petróleo en el mar Báltico y sufrió "daños importantes", informó un portavoz de la Guardia Costera sueca.
FUGASEl 22 de octubre, el Marco Polo, operado por la naviera alemana TT-Line, navegaba entre los puertos suecos de Trelleborg y Karlshamn cuando tocó tierra, sufrió daños y comenzó a tener fugas. Luego siguió avanzando y encalló por segunda vez.
Las 75 personas a bordo, entre pasajeros y tripulación, fueron rápidamente evacuadas. El agua entró al ferry, pero no corría riesgo de hundirse.
- El accidente liberó una mancha de combustible que finalmente llegó a las costas cercanas a Solvesborg, a unos 110 kilómetros (68 millas) al noreste de Malmo, la tercera ciudad más grande de Suecia. La prensa publicó fotografías de pájaros cubiertos con petróleo.
Inicialmente, el plan era extraer el petróleo restante del ferry. Sin embargo, eso se vio frustrado el domingo cuando el barco se deslizó debido al mal tiempo, señalaron la guardia costera sueca y la compañía TT-Line. El barco se alejó aún más, se atascó por tercera vez y derramó más petróleo.
El último "movimiento del buque no dañó los tanques de petróleo previamente intactos", dijo TT-Line. "Somos conscientes del impacto que ha causado el incidente y nos estamos tomando el caso muy en serio".
Las autoridades suecas, incluida la Agencia Sueca de Protección Civil, hasta ahora han desplegado aviones, drones, barcos y personal en el lugar. Se enviaron dos remolcadores para estabilizar el ferry. El lunes, las autoridades dijeron que estaban aumentando los recursos asignados con varios barcos y más personal después que se descubrieran más derrames de petróleo.
Hasta ahora se han retirado unos 25 metros cúbicos de petróleo y residuos de petróleo. Las autoridades afirmaron que el derrame actualmente se extiende a más de 5 kilómetros (3 millas) mar adentro.
Los fiscales impusieron multas al capitán y a un oficial que estaba a cargo en el momento del encallamiento, diciendo que actuaron imprudentemente al confiar en un GPS defectuoso.