Las autoridades en Italia han colocado bajo investigación al capitán del superyate que se hundió en medio de una tormenta frente a Sicilia la semana pasada, un hecho en que murieron siete personas, informó el lunes su abogado.
James Cutfield, un ciudadano neozelandés de 51 años de edad, está siendo investigado por posible homicidio en segundo grado y naufragio, dijo Aldo Mordiglia, uno de los dos abogados asignados a la defensa del capitán.
Mordiglia dijo que Cutfield, quien ya ha sido interrogado, será interrogado nuevamente el martes por los fiscales. Se negó a hablar de la estrategia de la defensa.
Bajo las leyes italianas, estar bajo investigación no implica culpabilidad y no necesariamente lleva a cargos penales.
Cutfield estuvo entre 15 sobrevivientes del naufragio, en que murió el magnate de la tecnología británico Mike Lynch, su hija Hannah y otras cinco personas.
El sábado, el fiscal jefe Ambrogio Cartosio confirmó que se había iniciado una investigación pero dijo que no se ha identificado a un sospechoso. Dijo que su equipo considerará todo posible elemento de responsabilidad incluyendo del capitán, la tripulación, los individuos a cargo de supervisión y el fabricante del yate.
El yate, un barco de 56 metros (184 pies) de eslora llamado Bayesian, se hundió cerca de Sicilia el lunes de la semana pasada.
Las autoridades se están enfocando en cómo un barco considerado indestructible por su fabricante, la compañía naviera italiana Perini Navi, se hundió mientras que un velero cercano salió prácticamente sin daño alguno.
Los fiscales dijeron que el hecho fue "extremadamente súbito" y que posiblemente se debió a un potente viento que descendió de la tormenta y se esparció rápidamente cuando tocó la superficie.
La tripulación se salvó a excepción del chef, mientras que seis pasajeros quedaron atrapados en la cabina.