MOSCÚ — Un reportero del Wall Street Journal detenido en Rusia por cargos de espionaje perdió la apelación a su arresto, lo que supone que permanecerá en prisión al menos hasta finales de noviembre.
Vestido con camisa azul, camiseta y tejanos, Evan Gershkovich compareció en la celda de cristal del acusado ante la Corte Municipal de Moscú para recurrir una vez más su detención. Miró inexpresivo a las cámaras en la corte.
Era la segunda ocasión en menos de un mes que el reportero comparecía ante un juez después de que la corte en Moscú declinara atender su apelación en septiembre sobre infracciones de procedimiento no especificadas.
La nueva decisión supone que Gershkovich, de 31 años, permanecerá encarcelado al menos hasta el 30 de noviembre a menos que en ese tiempo se admita una apelación y sea liberado, algo improbable.
El periodista fue detenido en marzo durante un viaje de trabajo a la ciudad de Ekaterimburgo, unos 2.000 kilómetros (1.200 millas) al este de Moscú, y un juez determinó en agosto que debe permanecer en la cárcel hasta el final de noviembre.
El proceso judicial está cerrado a la prensa porque la fiscalía dice que los detalles del caso penal son clasificados.
El Servicio Federal de Seguridad ruso afirmó que Gershkovich, "actuando por instrucciones del lado estadounidense, recopiló información que supone un secreto de estado sobre las actividades de una de las empresas del complejo militar-industrial ruso".
El reportero y el Journal rechazan las acusaciones y el gobierno de Estados Unidos le ha clasificado oficialmente como detenido de forma injusta. Las autoridades rusas no han detallado pruebas que respalden los cargos de espionaje.
Está detenido en la prisión moscovita de Lefortovo, conocida por sus duras condiciones. Gershkovich es el primer reportero estadounidense que enfrenta cargos de espionaje en Rusia desde 1986, cuando Nicholas Daniloff, corresponsal en Moscú de U.S. News y World Report, fue detenido por la KGB.
Los analistas han señalado que Moscú podría estar utilizando a estadounidenses detenidos como herramientas de negociación después de que las tensiones entre Estados Unidos y Rusia se disparasen cuando Rusia envió tropas a Ucrania. Al menos dos ciudadanos estadounidenses detenidos en Rusia en los últimos años —incluida la estrella de la WNBA Brittney Griner— han sido intercambiados por rusos encarcelados en Estados Unidos.
El Ministerio ruso de Exteriores ha dicho que consideraría un canje por Gershkovich sólo una vez haya un veredicto en su caso. Los juicios de espionaje en Rusia pueden tomar más de un año.