El anuncio se dio luego de que un juez levantara una orden judicial que impedía a la Administración Biden eliminar el llamado "Protocolo de Protección al Migrante" (MPP, en inglés), mejor conocido como "Quédate en México".
La política, implementada por el ex Presidente Donald Trump en 2019, requería que las personas que solicitaban asilo en Estados Unidos esperaran en ciudades mexicanas de la frontera mientras la justicia norteamericana procesaba sus solicitudes, lo que podía tomar meses o hasta años.
"El MPP tiene fallas endémicas, impone costos humanos injustificables y sustrae recursos y personal de otros esfuerzos prioritarios para asegurar nuestra frontera".
Activistas a favor de los migrantes ha criticado por años el programa, por considerarlo cruel y peligroso, pues empuja a los migrantes a lugares violentos donde el crimen organizado se aprovecha de ellos.
Poco después de llegar al poder, Biden intentó eliminar el "Quédate en México", junto con otras políticas de mano dura contra la migración del ex Mandatario. Pero varios estados republicanos, encabezados por Texas, demandaron al Gobierno federal, y un tribunal de la capital ordenó reinstaurar la política.
La Administración Biden apeló y el caso llegó a la Corte Suprema, que determinó el 30 de junio que el Gobierno federal tenía la autoridad de terminar el programa.
Desde el inicio de la política en enero de 2019 hasta su suspensión inicial, al menos 70 mil personas fueron enviadas a México según el Consejo Estadounidense de Inmigración, una organización sin fines de lucro fundada en 1987 que defiende a los inmigrantes.
El Gobierno de Trump argumentó que la política permitiría contener la inmigración ilegal a Estados Unidos.