PARÍS. FRANCIA. — Bomberos y otros rescatistas han participado en alrededor de 2.3000 operativos en Francia, algunos de ellos que salvaron vidas, indicó el primer ministro francés Michel Barnier el viernes ante lo que parece ser la mayor inundación de los últimos 40 años en el centro del país.
Barnier visitó el centro de crisis de las autoridades francesas en París y señaló que la gente no recuerda que haya habido una lluvia tan violenta registrada en el país. Más de 1.000 personas fueron evacuadas. La mayoría pudo regresar a casa el viernes.
El primer ministro también elogió un sistema de alarma, utilizado por primera vez, que envió mensajes de texto para exhortar a los residentes de las zonas afectadas a postergar o cancelar viajes previstos y permanecer en un sitio seguro.
La agencia meteorológica francesa Meteo France informó que cayeron hasta 700 milímetros (27,5 pulgadas) de lluvia en 48 horas en algunas zonas de las regiones Ardeche y Lozere.
El operador ferroviario nacional SNCF suspendió los viajes regionales entre las ciudades de Lyon y Saint-Étienne el jueves, señalando que las vías eran intransitables. Los servicios locales de tren seguirán suspendidos por varios días más, detalló.
Una de las principales autopistas entre las dos ciudades también estaba inundada y permanecerá cerrada el viernes.
Meteo France retiró su alerta roja por mal clima el viernes por la mañana, pero siguió advirtiendo del potencial de fuertes lluvias e inundaciones en el suroeste de Francia.