SALEM, Oregon, EE.UU.— Uno de los ganadores del premio de 1.300 millones de dólares de la lotería Powerball del mes pasado es un inmigrante de Laos que padece cáncer desde hace ocho años y se sometió a su último tratamiento de quimioterapia la semana pasada.
Cheng Saephan, de Portland, dijo en una conferencia de prensa celebrada por la Lotería de Oregon que él y su esposa, Duanpen, dividirían el premio a partes iguales con una amiga que aportó 100 dólares para comprar un lote de billetes con ellos, Laiza Chao.
Lo cobrarán en un pago único, que será de 422 millones de dólares después de impuestos.
"Podré mantener a mi familia y mi salud", dijo, y añadió que "buscaría un buen médico para mí".
Comentó que, al estar enfermo de cáncer, se preguntaba: "¿Cómo voy a tener tiempo para gastar todo este dinero? ¿Cuánto tiempo viviré?".
Después de comprar los billetes, Chao envió una foto de ellos a Saephan y le dijo: "Somos multimillonarios". Era una broma antes del sorteo, dijo, pero al día siguiente se hizo realidad.
El boleto ganador del Powerball se vendió a principios de abril en una tienda de comestibles Plaid Pantry de Portland, poniendo fin a una racha de tres meses en los que no hubo ganador.
Según la Lotería de Oregon, el premio de 1.300 millones de dólares es el cuarto más grande de Powerball en la historia y el octavo mayor de Estados Unidos.
El premio de lotería más grande ganado en Estados Unidos fue de 2.040 millones de dólares en California en 2022.