Junta militar no cede y fuerza regional se apresta a intervenir en Níger

El derrocamiento del presidente por los comandantes de la guardia presidencial ha recibido el apoyo de otros oficiales y el mando del ejército

ABUJA, Nigeria — Los intentos regionales de mediar para revertir el golpe de Estado en Níger y restaurar la democracia fracasaron apenas comenzaron. Las tensiones aumentan a medida que se acerca el plazo del domingo para una posible intervención por parte de otros países de África occidental.

El viernes, los jefes de defensa de la región terminaron de elaborar un plan para emplear la fuerza contra la junta nigerina —que aún debe ser aprobado por los jefes de Estado— si no se reinstala a Mohamed Bazoum en la presidencia. Una delegación del bloque Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) fue a Níger, pero no se pudo reunir con el cabecilla del golpe, general Abdourahmane Tchiani, quien declaró luego que cualquier agresión a Níger "recibirá una respuesta inmediata y sin aviso".

El derrocamiento del presidente por los comandantes de la guardia presidencial ha recibido el apoyo de otros oficiales y el mando del ejército. 

Perspectivas:

INTERVENCIÓN DE LA CEDEAO

Sería la primera vez en muchos años que la CEDEAO intentaría derrotar por la fuerza un golpe de Estado en África occidental, donde varias asonadas han triunfado desde 2020.

"Los sucesos de los últimos dos días vuelven más probable que esta intervención (militar) efectivamente suceda", dijo Nathaniel Powell, analista de África para la firma de inteligencia geopolítica Oxford Analytica. "Y si presentan resistencia a la intervención de CEDEAO, esto puede resultar realmente catastrófico".

La CEDEAO actuaría como una familia dividida, ya que tres de sus miembros —Mali y Burkina Faso, fronterizos con Níger, y Guinea— han tomado partido por la junta.

El Senado de Nigeria aconsejó al presidente de la nación, y actual presidente de la CEDEAO, que estudie otras opciones en lugar del empleo de la fuerza para restaurar la democracia, dadas "las relaciones cordiales existentes entre nigerinos y nigerianos". Las decisiones finales de la CEDEAO las toman los países miembros por consenso.

Los otros países fronterizos con Níger son Chad, cuyo gobierno ha tratado de mediar entre los golpistas y la CEDEAO, y Argelia y Libia, que no son miembros del bloque. Por lo tanto, cualquier intervención militar por tierra se produciría a través de la frontera con Nigeria, de 1.600 kilómetros (1.000 millas).

ESTRATEGIA MILITAR

No está claro que aspecto tendría una intervención militar en Níger, que es un país mediterráneo, pero el país tiene algunas ventajas territoriales. El enfoque inicial sería en Niamey, la capital, donde Bazoum está preso.

Con 25 millones de habitantes, Níger es el segundo país más grande de África occidental. Su territorio de 1,26 millones de kilómetros cuadrados (486.000 millas cuadradas) es 100 veces el de Gambia, donde la CEDEAO intervino por última vez en 2017.

Los esfuerzos para revertir el golpe de Estado en Níger son encabezados por su viejo aliado Nigeria, con un ejército de 223.000 efectivos —contra 10.000 de Níger, según datos del Banco Mundial— y cuatro veces más grande que la suma de los de Burkina Faso, Mali, Guinea y Níger.

En Níger algunos creen que la intervención podría incluir incursiones aéreas. Pero Barzoum podría servir de prenda de negociación y a la vez escudo de la junta.

Una fuerza de intervención terrestre desde Nigeria tendría que cruzar una zona casi deshabitada, pero poblada ahora por más de 200.000 refugiados que han huido de la violencia en el norte de Nigeria.

El aeropuerto internacional de Niamey se encuentra a 12 kilómetros (7 millas) del palacio presidencial donde está detenido Bazoum, lo cual dificultaría su ocupación. El país tiene otros dos aeropuertos internacionales, uno de ellos el de Agadez, donde Estados Unidos tiene una base de drones.

INQUIETUDES PARA EL MUNDO

El golpe militar en Níger, el más reciente de una serie en el África occidental, preocupa a Occidente porque consideraba a este país su último aliado estratégico en la lucha contra el terrorismo en el Sahel. Por otra parte, Níger tiene el 5% de los yacimientos mundiales de uranio.

Nnamdi Obasi, un asesor sénior en el International Crisis Group, advirtió que una intervención militar "podría degenerar en un conflicto indirecto entre fuerzas fuera de África, entre los que apoyan la restauración de la democracia y los que apoyan a la junta, que ha tomado una posición fuerte contra Occidente".

De un lado están los aliados estratégicos de Níger, Estados Unidos y Francia. Del otro están Rusia y su contratista militar privado Wagner, considerados aliados por los regímenes militares de Mali y Burkina Faso.

CONSECUENCIAS PARA NÍGER

Existen temores de que la batalla en caso de una intervención militar de CEDEAO no quede limitada a la capital.

"Temo que la junta utilizaría de buen grado su propio pueblo como carne de cañón o escudos humanos, y las fuerzas de CEDEAO no tienen una buena trayectoria en cuanto a evitar los daños colaterales", dijo James Barnett, especialista en África occidental en el Hudson Institute.

En el mejor de los casos, las tropas de la CEDEAO quedarían estacionadas en el país como fuerzas contra el golpe durante lo que podría ser un período largo. Eso no es un buen augurio para la democracia, tanto en el país como la región, dijo Powell.

"En ese caso, Bazoum luciría como alguien que solo es presidente gracias a los ejércitos extranjeros, lo cual destruiría su legitimidad".

RETOS PARA NIGERIA

Si Nigeria encabeza una intervención de la CEDEAO en Níger, se encontrará con problemas en el frente interno, donde sus fuerzas armadas, superadas en armas y efectivos, combaten a grupos armados que han matado a miles en el último año en las regiones del norte y el centro.

"Las armadas nigerianas tienen problemas internos en Nigeria", dijo Bello Tangaza, residente del estado norteño de Sokoto. "Tienen bandidos, tienen a Boko Haram, pero no han sabido resolver esos problemas y quieren ir a Níger".

Una intervención militar encabezada por Nigeria podría distraer la atención de los grupos armados que suelen entrar al país a través de la frontera porosa con Níger. Cuatro personas fueron secuestradas el miércoles en el distrito de Tangaza, y la gente teme que la situación no mejorará en un futuro previsible si el ejército vuelve su atención a Níger.