CIUDAD DE MÉXICO .-La familia de Carlos Tomás Aranda Burgoin, desaparecido en Osoyoos, Canadá, desde el 7 de julio, condenó el "irresponsable comunicado" que la Real Policía Montada de Canadá (RCMP, en inglés) emitió este jueves asegurando que un cuerpo hallado en un lago de la zona pertenece al del joven oaxaqueño, sin que se hayan realizado los estudios correspondientes para determinar la identidad del mismo.
"La familia del oaxaqueño condena la mala fe y falta de profesionalismo de parte de ese cuerpo de seguridad, toda vez que, en una clara violación a los derechos humanos, realizó una aseveración relativa a la identidad de un cuerpo hallado en un lago de la región sin tener un mínimo sustento científico, debido a que no se le ha practicado el protocolo de necropsia de ley, así como la toma de muestra de ADN", dijo en un comunicado.
El martes, dicha autoridad policial informó a los familiares del hallazgo de un cuerpo sin vida con rasgos que asemejan a los del joven desaparecido de 30 años de edad, incluida una de las prendas con las que se le vio por última vez.
La familia enfatizó que la RCMP les aseguró que, debido al estado de descomposición en el que se encontraba el cuerpo, procederían a realizar los estudios de ADN correspondientes para determinar la identidad y causas de muerte del cadáver.
Sin embargo, la autoridad policial informó este jueves que el cuerpo hallado pertenecía al de Carlos Tomás Aranda Burgoin, sin especificar si los estudios científicos fueron realizados o no.
"Faltando a la ética y pasando por encima de los derechos de Carlos y su familia, la Policía se aventuró a realizar dicha aseveración bajo el argumento de que 'un experto en identificación de identidades a partir de fotografías' -lo que sea que eso signifique- habría hecho observaciones al cadáver", agregó la familia en el comunicado.
Indicó que el padre y el hermano del joven, Octavio y Josué Aranda, respectivamente, acordaron el martes con la Cancillería mexicana que se trasladarían a Canadá mañana, "en el entendido de que, una vez allá, se le tomarían muestras de ADN para cotejarlas con el referido cadáver".
Ante ello, la familia condenó la "vergonzosa y negligente" actuación de la Policía canadiense, que, dijo, no hace más que sumarse al "muy lamentable" desempeño que ha tenido desde que Carlos fue reportado como desaparecido, el 7 de julio.
Con sus propios medios y ayudas financieras de familiares y amigos, el señor Octavio se trasladó a Canadá para buscar personalmente a su hijo y presionar a las autoridades para que realizaran las investigaciones correspondientes, pero indicó que no obtuvo respuesta de los oficiales.
"Incluso, su reporte relativo al caso, el cual fue generado y entregado hace unos días a la familia, no contiene más que sólo elementos que el propio señor Octavio investigó y recogió personalmente en su primera visita a Osoyoos, sin que se agregue ningún aporte sustancial de parte de la RCMP", concluyó la familia en el comunicado.
El joven oaxaqueño desapareció apenas un mes después de haber migrado a Canadá para seguir formándose en su carrera en turismo.
Llevaba una semana laborando en una granja de Osoyoos, cuando, después de una discusión con sus compañeros, supuestamente por un celular, salió corriendo del lugar la noche del 7 de julio y no lo volvieron a ver, de acuerdo con la información recabada por el padre.