Rusia amplió su ofensiva en Ucrania el viernes, atacando pistas aéreas en el occidente y una importante ciudad industrial en el oriente, mientras la enorme caravana que había estado parada durante una semana en las afueras de Kiev volvió a ponerse en marcha, extendiéndose cerca de la capital.
Analistas militares estaban divididos sobre si la maniobra de la caravana rusa representaba el inicio inminente de un asedio a Kiev o si únicamente se trataba de una acción de los soldados para dispersarse hacia sitos más protegidos.
En los frentes económico y político, Estados Unidos y sus aliados siguieron aislando y sancionando al Kremlin. El presidente estadounidense Joe Biden anunció que Estados Unidos reducirá drásticamente su estatus comercial con Rusia y también prohibirá las importaciones rusas de mariscos, alcohol y diamantes. La medida de revocar el estatus de “nación más favorecida” de Rusia se tomó en coordinación con la Unión Europea y los países del G7.
En el terreno de combate, las fuerzas del Kremlin parecían tratar de reagruparse y retomar impulso tras sufrir pérdidas fuertes y soportar una resistencia más dura de lo anticipado en las últimas dos semanas. El Ministerio de Defensa de Gran Bretaña dijo que Rusia estaba tratando de “reajustar y reubicar” a sus soldados, preparándose para los operativos contra Kiev.
“Ya es terrible, pero va a empeorar”, opinó Nick Reynolds, analista de guerra en el Royal United Services Institute, un centro de estudios británico.
Mientras la invasión cumple su 16to día, el presidente ruso Vladimir Putin dijo que hubo “algunos desarrollos positivos” en las negociaciones entre Rusia y Ucrania, pero no dio más detalles.
Por su parte, el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy dijo que las fuerzas ucranianas habían “alcanzado un punto de inflexión estratégico”, aunque no comentó más al respecto.
“Es imposible decir cuántos días más necesitaremos para liberar nuestra tierra, pero es posible decir que lo haremos”, declaró en un video.
Agregó que las autoridades estaban trabajando para establecer 12 corredores humanitarios y tratar de garantizar que las personas de otras partes del país reciban alimentos, medicamentos y otros productos básicos. Se cree que miles de civiles y soldados de ambas partes del conflicto han fallecido en la invasión.
BATALLAN EN EL NORTE
Hasta ahora, los rusos han hecho los avances más grandes en ciudades en el este y el sur de Ucrania, incluida Mariúpol, la ciudad portuaria que ha sido atacada fuertemente y donde los civiles buscaban alimentos y gasolina en medio de un asedio de 10 días de duración. Sin embargo, las fuerzas rusas han batallado en el norte y en los alrededores de Kiev.
El viernes, las fuerzas de Putin seguían perpetrando ataques aéreos en zonas urbanas como Kiev, Járkiv y Mariúpol, al tiempo que bombardeaban objetivos alejados de las principales zonas de combate.
Un edifico dañado en Járkiv, Ucrania.