WASHINGTON. — El presidente estadounidense Joe Biden será el anfitrión de un evento en la Casa Blanca la próxima semana para celebrar una directiva implementada durante la presidencia de Barack Obama que ofreció protecciones contra la deportación a jóvenes inmigrantes que estaban en el país de manera irregular, mientras su propio gobierno prepara posibles nuevos beneficios para otras personas cuyo estatus en el país no es legal, pero que tienen vínculos en Estados Unidos.
- Los funcionarios de la Casa Blanca están cerca de finalizar un plan que aprovecharía los poderes ejecutivos de Biden para proteger de la deportación a los cónyuges de ciudadanos estadounidenses que carecen de estatus legal, ofrecerles permisos de trabajo y facilitar su camino hacia la residencia permanente y, finalmente, la ciudadanía estadounidense, según cinco personas con conocimiento de las deliberaciones.
Las personas dijeron que esas medidas serían presentadas posiblemente a partir de la próxima semana, aunque un funcionario de la Casa Blanca señaló el jueves que no se ha tomado ninguna decisión final sobre lo que Biden anunciará, si es que realiza algún anuncio. Hasta principios de esta semana, los funcionarios no habían presentado la propuesta a Biden para que diera su aprobación final, lo que aumenta la incertidumbre en torno al calendario de cualquier anuncio. De momento, el presidente se encuentra en Italia para participar en la cumbre del G7.
Pero la semana pasada, cuando dio a conocer su directriz para suspender las solicitudes de asilo en la frontera —una acción que ha enfurecido a los grupos defensores de inmigrantes y a muchos legisladores demócratas—, Biden dio a entender que anunciaría otras medidas que iban a ser más del agrado de los defensores de los derechos de los inmigrantes.
"Hoy he hablado sobre lo que necesitamos para hacer más segura la frontera", dijo Biden en el evento de 4 de junio celebrado en la Casa Blanca. "En las siguientes semanas —y me refiero a las próximas semanas— hablaré de cómo podemos hacer que nuestro sistema de inmigración sea más justo y equitativo".
Para proteger a los cónyuges de estadounidenses, el gobierno federal tiene previsto usar un proceso llamado "permiso de permanencia temporal en el país". No sólo ofrece protecciones contra la deportación y permisos de trabajo para los migrantes que cumplan los requisitos, sino que también elimina un obstáculo jurídico que les impide acceder a la tarjeta de residencia permanente, o "green card", y eventualmente a la ciudadanía estadounidense.
El poder ejecutivo ya ha sido utilizado para otros grupos de inmigrantes, como los miembros de las fuerzas militares de Estados Unidos o sus familiares que no tienen un estatus legal.
Para las acciones de Biden, los funcionarios de la Casa Blanca estaban elaborando un plan que ofrecería un permiso de permanencia temporal a los cónyuges de estadounidenses que han estado en el país por al menos cinco o 10 años, de acuerdo con las personas familiarizadas con las deliberaciones, las cuales hablaron bajo condición de anonimato para discutir deliberaciones internas de la Casa Blanca.