Washington DC, Estados Unidos.-Las protestas en contra de la guerra de Israel en Gaza en decenas de universidades de Estados Unidos representan un riesgo político para el Presidente Joe Biden ante el impacto que estas pudieran tener para mantener unida a la amplia coalición de votantes que lo llevó al triunfo en 2020.
Con una difícil reelección en puerta, las protestas pro Palestina han llevado a recordar el ambiente previo a la elección presidencial de 1968, en la que el republicano Richard Nixon derrotó al entonces Vicepresidente demócrata Hubert Humphrey, luego meses de caos derivados de las protestas por la Guerra de Vietnam.
"Somos una sociedad civil y el orden debe prevalecer... Existe el derecho a protestar, pero no el derecho a provocar el caos", dijo Biden el jueves en la Casa Blanca, en su primer mensaje en torno a las protestas.
Según un sondeo de Emerson College de esta semana, el virtual candidato republicano Donald Trump tiene la ventaja en 7 de los Estados claves donde se definirá la elección de noviembre: Arizona, Georgia, Michigan, Nevada, Carolina del Norte, Pensilvania y Wisconsin, mostrando la fragilidad de Biden.
"Los extremistas radicales y los agitadores de extrema izquierda están aterrorizando los campus universitarios, como posiblemente habrán notado. Y a Biden no se le encuentra por ningún lado. No ha dicho nada", dijo Trump sobre las protestas en el crucial Estado de Wisconsin el miércoles.
Para repetir su victoria este 2024, Biden tiene el reto de mantener animada a la coalición que lo llevó al triunfo en los Estados claves, compuesta por votantes jóvenes de ideología progresista, republicanos decepcionados de Trump y hasta independientes de centro.
Y es en ese contexto es que Biden debe hilar fino para evitar alienar a dicha variopinta coalición electoral.
Sólidamente, detrás del esfuerzo israelí para defenderse tras los ataques terroristas del grupo islámico Hamas del 7 de octubre, Biden enfrenta, sin embargo, un dilema electoral ante el descontento entre los jóvenes progresistas por el apoyo estadounidense a la guerra de Israel que ha costado más de 30 mil vidas.
De acuerdo con una encuesta de la firma Morning Consult publicada el miércoles, casi el 50 por ciento de los votantes entre 18 y 34 años quisieran ver a sus autoridades universitarias hacer pronunciamientos condenando a Israel, pero el número se reduce a menos del 25 por ciento para los mayores de 45 años.
Bajo el fantasma de la derrota de Humphrey tras el caos de 1968, Biden optó por subrayar el orden.
"Biden está haciendo lo que Hubert Humphrey no pudo hacer en 1968: optar por el lado de la ley y el orden", dijo Aaron David Miller, del Carnegie Endowment for International Peace, en la red social X.
Desde el Capitolio, el presidente de la Cámara Baja, el republicano Mike Johnson, intentó sacar ventaja política, cuando visitó la Universidad de Columbia en Nueva York, lugar de origen de las protestas. Ahí, acusó que estas son únicamente expresiones de antisemitismo y violencia.
En una coincidencia histórica, la Convención Nacional del Partido Demócrata, que ungirá a Biden como su candidato en la elección de noviembre, está programada para realizarse en agosto en Chicago, la misma ciudad que en 1968 vio una Convención Nacional Demócrata llena de protestas violentas por Vietnam.