Los estudiantes del estado de Nueva York tendrían que renunciar a sus celulares durante el horario escolar a partir del próximo ciclo académico bajo una propuesta anunciada por la Gobernadora Kathy Hochul.
El plan, que requeriría la aprobación de los legisladores, obligaría a los alumnos a desconectarse de sus teléfonos y otros dispositivos personales mientras estén en la escuela, incluyendo en clase, durante el almuerzo y en los pasillos.
Hochul, política demócrata, ha señalado durante meses la posible prohibición a los celulares.
Limitar el acceso a los dispositivos durante el horario escolar, dijo, ayudará a los estudiantes a concentrarse en clase y mejorar su salud mental.
"No estamos desarrollando las habilidades que necesitamos porque los niños están distraídos con los teléfonos", señaló Hochul en una conferencia de prensa en la capital Albany.
"¿Y qué tan difícil es para nuestros profesores que intentan enseñar álgebra y geografía compitiendo con bailes virales, mensajes de amigos y, a veces amenazas o acoso? ¿Cómo prestas atención al tema en cuestión cuando esto está sucediendo?", cuestionó.
Al menos ocho estados en la Unión Americana han promulgado medidas que prohíben o restringen el uso de los celulares en las escuelas.
Otros estados han alentado a los distritos a imponer restricciones o han proporcionado fondos para que se instalen equipos con el fin de almacenar los teléfonos durante el horario escolar.
Tres gobernadores han propuesto recientemente restricciones similares para los celulares en las escuelas.
En el estado de Nueva York, los planteles tendrían cierta flexibilidad sobre cómo implementar la propuesta, y los distritos decidirán cómo almacenar los dispositivos de los estudiantes y otras reglas, informó la oficina de la Gobernadora.
Los líderes del Congreso del Estado parecen abiertos a la propuesta.
Las restricciones de teléfonos en otros lugares a menudo se han enfrentado a la oposición de padres que argumentan que necesitan comunicarse con sus hijos durante situaciones de emergencia.
La ciudad de Nueva York, que tiene el distrito escolar más grande de Estados Unidos, consideró el año pasado la prohibición de celulares en las escuelas, pero abandonó el plan debido a preocupaciones de los papás.