LOS ÁNGELES.- Los bomberos del sur de California avanzaban el sábado para poner bajo control un incendio forestal que devastó más de 130 estructuras, luego de que los vientos racheados disminuyeron y se pronosticaban condiciones meteorológicas favorables durante el fin de semana.
El incendio Mountain en el condado de Ventura se mantuvo en un área de 83 kilómetros cuadrados (32 millas cuadradas) y estaba contenido en un 17%, dijo Clint Swensen, jefe de la sección de operaciones de bomberos.
El fuego comenzó el miércoles y se expandió rápidamente con la llegada de vientos secos, cálidos y racheados del noreste, lo cual obligó a miles de residentes a huir y amenazó 3.500 estructuras en vecindarios suburbanos, ranchos y áreas agrícolas alrededor de la comunidad de Camarillo.
Las advertencias de alerta roja, que indican condiciones de alto riesgo de incendio, expiraron en la mayoría de la región el jueves. El humo cubría el área, el sábado, debido a vientos bastante ligeros que oscilaban entre ocho y 16 kilómetros por hora (entre cinco y 10 millas por hora), las mismas condiciones que estaban ayudando a los bomberos, dijo Ryan Kittell, meteorólogo del Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos, en Oxnard.
"Es muy favorable para el fin de semana", dijo Kittell. "Bueno para los esfuerzos de lucha contra incendios, pero no excelente para la calidad del aire".
Algunos pronósticos mostraban que los vientos volverían a la zona el martes, pero no en la medida vista la semana pasada, dijo Kittell.
La región al noroeste de Los Ángeles ha sido testigo de algunos de los incendios más destructivos de California a lo largo de los años.
El incendio Mountain creció rápidamente de menos de 1,2 kilómetros cuadrados (media milla cuadrada) a más de 41 kilómetros cuadrados (16 millas cuadradas) en poco más de cinco horas el miércoles, con ráfagas que superaron los 98 km/h (61 mph).
El gobernador californiano Gavin Newsom ha declarado un estado de emergencia en el condado de Ventura.