Wall Street entra en mercado bajista; el S&P 500 cae 3.9 por ciento

El índice se hundió el lunes, en la primera oportunidad que tuvieron los inversores para comprar y vender después de tener el fin de semana para reflexionar sobre la sorprendente noticia de que la inflación está empeorando y no mejorando

NUEVA YORK

Wall Street entró el lunes en lo que se denomina un mercado bajista, después de que los temores a una economía frágil y el aumento en las tasas de interés hicieran que el S&P 500 cayera más de un 20% por debajo de su récord establecido a principios de año.

El índice se hundió 3.9% el lunes, en la primera oportunidad que tuvieron los inversores para comprar y vender después de tener el fin de semana para reflexionar sobre la sorprendente noticia de que la inflación está empeorando, no mejorando.

El promedio industrial Dow Jones bajó brevemente más de mil puntos antes de terminar con una pérdida de 876.

En el centro del descenso se encontraba de nuevo la Reserva Federal y sus esfuerzos por controlar la inflación. Su principal método para hacerlo es subir las tasas de interés para desacelerar la economía, una herramienta con la que se corre el riesgo de provocar una recesión si se utiliza de forma demasiado agresiva.

Con la Fed aparentemente obligada a ser más agresiva, los precios cayeron para todo y para todos, desde los bonos hasta el bitcoin, y desde Nueva York hasta Nueva Zelanda. Algunas de las caídas más pronunciadas afectaron a los grandes ganadores de la era de los tasas bajas, como los valores tecnológicos de alto crecimiento y otros antiguos favoritos de los inversores. Tesla se desplomó 7,1% y Amazon cayó 5,5%. GameStop perdió 8,4%.

“Lo mejor que puede hacer la gente es no entrar en pánico y no vender bajo”, dijo Randy Frederick, director gerente de correduría y derivados en el Centro Schwab de Investigación Financiera, “y probablemente no hemos tocado fondo”.

Algunos economistas conjeturan que la Fed subirá el miércoles su tasa de interés clave en tres cuartos de punto porcentual. Eso es el triple de lo habitual y algo que la Fed no ha hecho desde 1994. Los operadores ven ahora un 28% de probabilidades de que se produzca esta megasubida, frente al 3% de hace una semana, según CME Group.

Nadie cree que la Fed vaya a detenerse ahí, y los mercados se preparan para una serie de subidas mayores de lo habitual. Esto se sumaría a algunas señales desalentadoras sobre la economía y sobre utilidades corporativas, incluida una lectura preliminar sobre el sentimiento de los consumidores agravado por los altos precios de la gasolina.

La economía sigue resistiendo en general, pero el peligro es que el mercado laboral y otros factores estén tan dinámicos que alimenten una mayor inflación. Por ello, la Reserva Federal se encuentra en medio de un giro de 180 grados, alejándose de las bajas tasas de interés que adoptó al inicio de la pandemia y que apuntalaron las acciones y otras inversiones con la esperanza de estimular la economía.

La constatación de que la inflación se está acelerando también está haciendo que los rendimientos de los bonos estadounidenses alcancen sus niveles más altos en más de una década. El rendimiento del bono del Tesoro a 2 años se disparó de 3.06% el viernes a 3.36% el lunes. El rendimiento del bono del Tesoro a 10 años saltó de 3.15% a 3.37%.

En Wall Street, el S&P 500 cayó 151.23 puntos para cerrar en 3 mil 749.63, con lo que se ubica un 21.8% por debajo de su récord establecido a principios de este año, alcanzando lo que los inversores llaman un mercado bajista.

El S&P 500 ha perdido casi 9% en apenas tres días. Esa es su peor racha desde los primeros días del desplome por el coronavirus en marzo de 2020.

El Dow Jones perdió 876.05 unidades, o 2.8 %, para situarse en 30.516,74 el lunes, mientras que el compuesto Nasdaq cayó 530.80 puntos, o 4.7 %, para quedar en 10 mil 809.23.