"Es urgente una inversión que mejore la calidad y la productividad de los servicios de salud. La calidad no es un lujo de países ricos, de alto ingresos, es un requisito, salud sin calidad es un desperdicio", aseguró Frederico Guanais, jefe adjunto de la división de Salud de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Destacó que, tras la pandemia de Covid-19, los sistemas de salud de los países de América Latina y el Caribe se encuentran en peores condiciones.
En opinión de Guanais, la región necesita invertir a partir de cuatro puntos clave para mejorar la calidad y atención en materia salud.
El primero es contar con una infraestructura robusta de datos de salud que permita conocer cantidad de camas disponibles y tiempo de espera para la atención.
También es clave medir la seguridad de los pacientes, para lo que se requiere un itinerario asistencial que implica dar seguimiento a cada uno de ellos y conocer qué ocurre con cada uno al ingresar a un hospital.
La inversión en personal de salud es otro punto clave.
El cuarto punto consiste en medir resultados de la atención de los servicios a partir de experiencias relevantes para los pacientes, agregó Guanais.