Cd. de México .-En junio pasado, 56 de cada 100 personas ocupadas en el País trabajaron en la informalidad, muestra información del Inegi.
De las 57.43 millones de personas ocupadas en México, 32.07 millones trabajaron informalmente, 5.1 por ciento más que en junio de 2021.
En tanto que 25.36 millones lo hicieron en el mercado formal, un incremento de 3.2 por ciento anual.
El 60 por ciento de la población que encontró empleo en la informalidad son hombres y el porcentaje restante mujeres, en un mes en que la Tasa de Informalidad Laboral del País (TIL) fue de 55.84 de la población ocupada.
- La TIL en mujeres fue de 56.35 por ciento y para hombres de 55.50 por ciento
Esta tasa considera, sin duplicar, a los que son laboralmente vulnerables por la naturaleza de la unidad económica para la que trabajan, así como a aquellas personas cuyo vínculo o dependencia laboral no reconoce su fuente de trabajo.
A nivel nacional, la tasa de informalidad más baja se registró en abril de 2020, con 47.89 de la población ocupada y fue la única vez, desde que se tiene registro, que la ocupación formal superó a la informal con 52.11 por ciento.
Para Clemente Ruiz Durán, profesor de la Facultad de Economía de la UNAM, la informalidad ha sido la válvula de escape ante la debilidad del mercado formal.
Explicó que la informalidad es el resultado de una mala política laboral que ha tenido el País por años, misma que no se ha logrado resolver con la actual administración federal.
El problema fundamental es que el sector formal de la economía no crece a un ritmo adecuado, destacó, por lo que la gente tiene que buscar de qué forma subsistir y la única salida es la informalidad.
Agregó que hace falta una reforma al sistema de seguridad social que considere un esquema fiscal que lo pueda sostener, pero para ello se requiere que la Secretaría de Hacienda logré hacer un registro federal de contribuyentes de los que hoy están en la informalidad.
Juan Carlos Moreno Brid, catedrático de la misma Facultad, comentó que la informalidad es un salvavidas.
Dijo que es la "reina del empleo", pues da cuenta de puestos de trabajo que no son los más socorridos, no son los mejores y son de última instancia en una economía, como la mexicana, que está entrampada en la falta de crecimiento por ausencia de inversión.