CIUDAD DE MÉXICO
La moneda digital del Banco de México (Banxico) necesita ser arropada por estrategias e incentivos para que tenga un impacto verdadero en la sociedad y no suceda lo de CoDi, que a pesar de que se lanzó hace cuatro años su adopción va todavía muy rezagada, aseveró el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).
A finales de 2021, el Gobierno federal anunció que Banxico tendría hacia 2024 su propia moneda digital -una cibermoneda que fungirá en paralelo a la emisión de dinero físico en billetes y monedas- bajo un proyecto que tendrá distintas fases de desarrollo e implementación.
"Como el caso de CoDi necesita estar arropado para que tenga un lanzamiento mucho más favorable, mucho más propositivo, la herramienta de Cobro Digital (CoDi) que lanzó Banxico tiene todavía una adopción muy baja, primero porque careció de toda una estrategia del lanzamiento.
"Hoy día México es de los países menos bancarizados. Nuestra bancarización es muy baja, del 35 por ciento, y está bancarización comparado con países desarrollados, pues queda muy rezagada, y solo es comparable con otros países de Latinoamérica donde además estamos quizá abajo de la media", dijo José Antonio Quesada, presidente de la 50 Convención Nacional IMEF, en conferencia de prensa.
El especialista resaltó que es importante que haya los mecanismos para que en todos lados se pueda utilizar la moneda digital, y luego que se tenga una cobertura universal en todo el País de lo que son las telecomunicaciones básicas para poder operarla (la moneda).
"El último corte que me tocó ver CoDi estaba más o menos en el millón de usuarios, o sea, realmente todavía ha sido muy bajo", comentó.
Hasta ahora, los bancos tienen implementado el CoDi en sus aplicaciones, pero es una herramienta que el gremio no ha promovido de manera frontal
- CoDi permite realizar cobros y pagos desde el celular con únicamente una cuenta de cualquier banco o institución financiera, y no cobra comisiones.