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En ese sentido la firma sostuvo que los ataques registrados durante este año representaron un aumento de 22 por ciento en comparación con lo reportado en el 2022.
Las consecuencias son muy peligrosas para la sociedad, ya que afectan desde la atención de las ambulancias, la provisión de medicamentos y la ejecución de cirugías, advirtió el directivo.
Indicó que desde el 2020, los hackers intensificaron sus ataques contra hospitales en todo el mundo, aprovechando que los sistemas estaban trabajando al máximo de su capacidad ante la pandemia de Covid-19.
Agregó que a medida que las organizaciones sanitarias continúen con su proceso de digitalización serán más vulnerables, sobre todo si no invierten en una estrategia de ciberseguridad.
La empresa detalló que los principales ataques al primer semestre del 2023 fueron ransomware con 54 por ciento y amenazas de datos con 46 por ciento.
La consultora IDC reveló que 85 por ciento de las organizaciones del sector considera la ciberseguridad es un aspecto como un factor clave para mitigar los altos riesgos que presenta la industria.
Señaló que las empresas del ramo reconocieron que existen otras vulnerabilidades, como la transferencia de información y datos que se realizan entre compañías y terceras compañías.
IDC encontró que más del 60 por ciento de las firmas farmacéuticas comparte datos y conocimientos con entidades externas de su ecosistema, como socios de negocio, clientes, y proveedores.