Empresarios no consideran sostenible aranceles de Trump

Los aranceles anunciados por Donald Trump a productos mexicanos generan incertidumbre, pero líderes empresariales de Jalisco consideran que su aplicación no sería sostenible a largo plazo

Los aranceles anunciados por Donald Trump a productos mexicanos generan incertidumbre, pero líderes empresariales de Jalisco consideran que su aplicación no sería sostenible a largo plazo. 

Tanto Miguel Ángel Landeros Volquarts, presidente del Consejo Mexicano de Comercio Exterior (Comce) de Occidente, como Fernando García de Llano, ex presidente de la American Chamber capítulo Guadalajara, destacan que la interdependencia económica entre México y Estados Unidos dificultaría su implementación prolongada.

Para Landeros Volquarts, el impacto inicial de los aranceles sería significativo, pero cree que la propia economía estadounidense no soportaría los costos asociados. 

"Muchos productos de exportación de Estados Unidos están compuestos por insumos mexicanos que se verían sumamente afectados. La competitividad de Estados Unidos también bajaría, habría inflación y recesión", señaló. 

Además, aseguró que México debe mantenerse en constante comunicación con sus socios comerciales norteamericanos para exponer las afectaciones mutuas: "Al final, los consumidores norteamericanos terminan pagando, y esto genera una presión directa que podría frenar la medida rápidamente".

En términos locales, Miguel Ángel Landeros advirtió que si se impusiera un arancel generalizado del 25 por ciento, muchas empresas mexicanas sufrirían, pero también señaló que la medida no sería viable en el mediano plazo para Estados Unidos debido a su dependencia de productos manufacturados en México. 

"Sustituir una planta de manufactura lleva varios años. En el caso de Jalisco, por ejemplo, exportamos tecnología, agroindustria y productos que son fundamentales para su economía", explicó Landeros.

Fernando García de Llano coincidió con esta perspectiva, subrayando que los aranceles enfrentarían obstáculos legales y económicos.  

"No se gobierna con órdenes ejecutivas. Muchas de estas medidas enfrentan denuncias en tribunales y requieren del respaldo legislativo para sostenerse", mencionó. En este sentido, aseguró que el T-MEC otorga herramientas a México para defenderse y limitar el alcance de medidas como los aranceles.

Además, García de Llano destacó que los consumidores estadounidenses enfrentarían un aumento en los costos de bienes esenciales si los aranceles se aplicarán.

 "Si compran un carro, una computadora o un semiconductor hecho en Jalisco, les va a salir más caro. Estados Unidos necesita lo que producimos en México, y esta interdependencia comercial sería el principal freno para que los aranceles se mantengan", aseguró. 

Ambos empresarios recalcaron que, aunque el impacto inicial sería desafiante, la economía estadounidense sufriría presiones que limitarían la duración de las tarifas. 

"Es un efecto boomerang: los aranceles afectarían a México, pero también causarían inflación y recesión en Estados Unidos. En cuestión de semanas o meses, sería insostenible mantenerlos", concluyó García de Llano.