Frenar al dengue es responsabilidad social, dice académica

Para frenar al dengue se requiere más que un programa gubernamental

Para frenar al dengue se requiere más que un programa gubernamental, es indispensable el compromiso de la sociedad para mantener limpios patios y azoteas para que estén libres de posibles criaderos, aseguró el director del Instituto Regional de Investigación en Salud Pública de la UdeG, Ezequiel Magallón Gastelúm.

 "No tenemos consciencia de la limpieza adecuada para que no se incremente el número de mosquitos", comentó el especialista.

 Agregó que los programas de Gobierno son los adecuados para mantener a raya al mosquito, pero si la gente no ayuda con la eliminación de posibles criaderos, los programas no rendirán fruto ni eliminarán al virus.

 "Como sociedad culpamos al Gobierno del alto número de casos de dengue, pero no somos responsables de limpiar nuestros patios, tapar y echar agua a las alcantarillas, limpiar piletas, abrir las puertas a los brigadistas para que revisen y coloquen insecticida, y mantener las medidas recomendadas para que no tengamos un exceso de mosquitos que puedan propagar el dengue", subrayó.

 Y es que el ciclo de vida del mosco transmisor es de tres días y la fumigación sólo mata al insecto en su vida adulta, por lo que, al no eliminar los criaderos que se encuentran en patios o azoteas, al tercer día de haber puesto insecticida, habrá, nuevamente, moscos.

 Actualmente, Jalisco ocupa el primer lugar nacional por número de casos de dengue, al acumular 8 mil 436, de los cuales, 43.46 por ciento son graves o con signos de alarma.

 De seguir esta tendencia de crecimiento, a finales de octubre se podría superar el número de casos que se reportaron en 2019, cuando Jalisco vivió una de sus peores crisis de dengue.

 Magallón Gastelúm precisó que a esto se suman factores externos como el clima y un incremento en las temperaturas, lo que prolonga la vida del mosquito transmisor de la enfermedad.

 "El dengue se propaga de manera cíclica. Las temporadas de inicios de lluvia y el final de éstas, es decir, los meses de septiembre a noviembre siempre son en los que más casos detectados tenemos. Esto se debe a que el agua se estanca con mayor frecuencia, el clima no corresponde a la temporalidad", detalló.