Los tumores oculares en perros, aunque poco frecuentes, pueden afectar la visión y la salud general de las mascotas. Estos tipos de cáncer pueden desarrollarse en diferentes áreas del ojo y su tratamiento depende del tipo y la gravedad del tumor. A continuación, la veterinaria Cristina Pascual, señalará los tipos más comunes de tumores oculares en perros, sus síntomas y opciones de tratamiento.
Tumores de párpado o tumores palpebrales: Estos son los tumores oculares más frecuentes en perros y suelen afectar las glándulas de Meibomio. Los adenomas (benignos) y los adenocarcinomas (malignos) son los tipos más comunes, pero también pueden presentarse melanomas, mastocitomas e histiocitomas en el área de los párpados.
Tumores de conjuntiva o conjuntivales: Tienen una mayor tendencia a la malignidad, aunque su incidencia en perros es baja. Entre los más comunes están los melanomas, carcinomas de células escamosas y papilomas. Debido a su naturaleza invasiva, estos tumores requieren un tratamiento cuidadoso.
Tumores de córnea y esclerótica: Estos son poco frecuentes, aunque en perros jóvenes se observan papilomas y en perros adultos, carcinomas de células escamosas y melanomas.
Tumores de úvea: La úvea incluye el iris y otras estructuras internas del ojo. El melanoma de úvea es el tipo más común y puede presentarse como una mancha oscura dentro del ojo.
Tumores orbitarios: Son aquellos que se desar rollan en los tejidos alrededor del globo ocular, como los osteosarcomas y adenocarcinomas nasales. Generalmente, son malignos y se diagnostican en etapas avanzadas, cuando la enfermedad ya ha progresado.
Pérdida de visión: El perro puede presentar dificultad para ver o signos de desorientación.
Dolor ocular y blefarospasmo (ojo cerrado): El dolor puede manifestarse en una postura protectora del ojo.
Inflamación y enrojecimiento (hiperemia): Los ojos pueden aparecer irritados, con lagrimeo excesivo.
Exoftalmia (ojos saltones): Ocurre cuando el tumor empuja el globo ocular hacia adelante.
Estrabismo y glaucoma: Problemas de alineación ocular y presión intraocular elevada son otros signos frecuentes.
La detección temprana de cualquier anomalía ocular en perros es clave para mejorar el pronóstico y aumentar la efectividad de los tratamientos. Si un perro presenta síntomas como enrojecimiento, irritación o una masa en el ojo, es esencial llevarlo al veterinario para una evaluación detallada. El tratamiento de los tumores oculares, aunque a veces complejo, puede prolongar y mejorar la calidad de vida de las mascotas cuando se realiza de manera adecuada. El costo del tratamiento varía, pero una cirugía para extraer un tumor ocular puede oscilar entre 400 y 600 euros (8 mil 653 y 12 mil 979 pesos mexicanos a la fecha), según el tipo de intervención y los cuidados necesarios.
Con los avances en la medicina veterinaria, cada vez existen más opciones para tratar y controlar estas enfermedades, lo que ofrece esperanza a las familias que enfrentan el desafío de cuidar de una mascota con un diagnóstico de cáncer ocular.