CIUDAD DE MÉXICO
Tras dos años de uso continuo del cubrebocas, algunas personas han desarrollado el llamado “síndrome de la cara vacía”, un curioso efecto secundario entre quienes han dejado de usar la mascarilla, pues la consideraban un elemento protector de miedos e inseguridades.
El síndrome de la cara vacía es una fobia que se caracteriza por la sensación de inseguridad generada al dejar al descubierto la cara, en este caso, por la retirada de los cubrebocas.
Se le conoce como 'mask fishing’ y puede tener dos orígenes: el miedo a mostrarse a los demás y la fobia a contagiarse.
Afecta en mayor medida a los adolescentes, ya que estos jóvenes están en una etapa de la vida de crecimiento personal y físico, en el que presentan muchos cambios, publicó ABC.
“Así, la mascarilla durante estos dos años les ha servido de escudo protector con el que han ocultado el acné, el vello en la cara o los 'brackets'. No obstante, el 'mask fishing' no es algo solo de jóvenes, sino que los adultos también podrían sufrir el síndrome de la cara vacía, tras haber ganado seguridad por llevar la mascarilla”, destacó.
En ese sentido, para poder superar este síndrome recomendó a estas personas que no se fuercen a dejar de usarla de tajo al volver a su normalidad, sino que ellos mismos vayan retirándola poco a poco hasta que comprueben por sí mismos que estén o no con la mascarilla van a ser aceptados.
Los expertos recomiendan, además, hacer una lista de situaciones que se detecten como incómodas para la persona, que vaya de menor a mayor grado y, a partir de ahí, ir enfrentándose a ellas de las más sencillas a las más complejas.
Otro ejemplo positivo será recolocar todos los pensamientos irracionales que se generan en la mente, como pensar que la mascarilla es un obstáculo, puesto que de la misma manera que protege también es un elemento que separa de las personas, ya que ver el rostro de las personas es algo que ayuda a regular las emociones.
Los afectados tendrán que colocar en la balanza todos los beneficios que conlleva el no usar el cubrebocas como puede ser una respiración más óptima, una mejor vista o sentir menos calor, entre otras cosas.
El pasado 1 de abril, la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Scheinbaum, levantó la recomendación del uso de cubrebocas en exteriores.