Guadalajara, Jal.
Por primera vez para la ciencia, fue identificada y descrita la presencia de un jaguar dentro de la Sierra de Tapalpa, en el Municipio de Chiquilistlán, un hallazgo que se reportó este 31 de julio de 2022 en la Revista Mexicana de Mastozoología, especializada en mamíferos.
Se trata de una especie catalogada en peligro de extinción en la Norma Oficial Mexicana 059-Semarnat-2010De acuerdo con la publicación científica, el ejemplar se captó el 21 de julio de 2021 mediante cámaras trampa colocadas dentro de la Unidad de Manejo Ambiental Mazati, como parte de un proyecto que pretendía registrar mediante imágenes la fauna que habita en ese ecosistema.
El autor del documento, Juan Pablo Silva Castañeda, relata que al detectar en una de las cámaras la presencia del jaguar, investigó cuántos registros previos había en la región, pero encontró que los más cercanos estaban a 54, 67, 94 y 134 kilómetros de distancia hacia el Sur, dentro de Autlán, Cihuatlán, Villa Purificación y La Huerta.
"Este es el primer registro corroborado para jaguar en el Municipio de Chiquilistlán y para toda la Meseta de Tapalpa, Jalisco, siendo un registro fortuito para el estado y para la zona para ampliar el conocimiento de la especie en sitios como la UMA Mazati, sitios de manejo y aprovechamiento sustentable", informa el estudio publicado.
"Por la posición en la que pasó el jaguar en el sitio sólo se pudo captar el costado derecho del felino, debido a la humedad del ambiente no se pudo obtener una imagen nítida; a pesar de ello sí nos permitió una identificación parcial del individuo", explicó.
Al ser el jaguar el depredador tope de los bosques de la región, su presencia en la Sierra de Tapalpa evidencia que la cadena alimenticia está completa y funciona de manera equilibrada, además, que dicha meseta guarda aún condiciones de conectividad con otros ecosistemas del sur donde ya ha sido visto.
Es de señalar que la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial anunció que se encuentra identificando las rutas de tránsito de la fauna en la Sierra de Tapalpa hacia otros ecosistemas vecinos para garantizar su condición de corredor biológico, y con ello evitar que sus vías de movilidad se obstruyan con carreteras, cultivos o viviendas.
En dicho proyecto participan asociaciones civiles internacionales que inyectan recursos para la recuperación de las zonas de flujo de especies, que ya se encuentran presionadas por la presencia de huertas aguacateras y cabañas turísticas.
La consolidación de dichos corredores de fauna, que conectarían a las especias desde la Sierra de Manantlán hasta la Sierra de Quina, no sólo beneficiarían al jaguar, puma y ocelote, sino a otras especies como el pecarí, venado, y más.
Tan sólo el proyecto de identificación de fauna de Silva Castañeda arrojó un registro total de 15 especies de mamíferos, entre ellos el jaguar, y 3 de aves, luego de tres años de proyecto que generó 5 mil 211 imágenes en 11 zonas de muestreo.