¿Nos conviene y es momento de comprar o no dólares?

Esta mañana se observó algo de apetito por riesgo en los mercados, pues la vacuna desarrollada por la Universidad de Oxford y AstraZeneca demostró tener el 70% de efectividad en la prevención de casos de Covid-19

En medio de tanta incertidumbre sobre el futuro de las economías a nivel mundial, la cotización del dólar se ha comportado de manera muy volátil. Conforme las expectativas son más o menos optimistas sobre la posibilidad de que haya una recuperación, así como el desarrollo y aplicación de una vacuna contra el Covid-19, la divisa tiende a subir y bajar. 

Si las expectativas son más positivas, los inversionistas se sienten más confiados de diversificar su cartera adquiriendo valores e instrumentos de mayor riesgo, por lo que la demanda de dólares disminuye y su cotización también. 

Por el contrario, cuando las expectativas son más negativas, los inversionistas se refugian en instrumentos o valores más seguros y estables, como los bonos del Tesoro de Estados Unidos, con lo que la demanda y cotización del billete verde también tiende a aumentar. 

Esta mañana se observó algo de apetito por riesgo en los mercados, pues la vacuna desarrollada por la Universidad de Oxford y AstraZeneca demostró tener el 70% de efectividad en la prevención de casos de Covid-19. 

A pesar de que el nivel de eficacia está por debajo de los mostrados por Pfizer y Moderna, la vacuna de Astra-Oxford tiene la ventaja de que la dosis puede mantenerse en temperatura de refrigerador, lo que facilita el proceso de distribución. 

¿Cómo impacta a México que baje o suba el dólar? La baja del dólar beneficia a quienes tienen en dicha divisa, compromisos financieros (deuda de empresas y gobierno), la necesidad de adquirir bienes y servicios foráneos (importadores), o sencillamente el deseo o necesidad de viajar al extranjero, en particular a Estados Unidos. 

Por otra parte, el alza del dólar beneficia a quienes exportan, ya que el incremento del tipo de cambio eleva sus ingresos, abarata sus productos y los hace más competitivos en los mercados internacionales a nivel de precio. Sin embargo, el aumento de la divisa estadounidense también eleva la deuda que tengan las empresas o los gobiernos estatales y federal en dicha moneda. 

También, el incremento o baja del dólar tiene impacto en la inflación en el mercado interno, en la medida que encarece o abarata los insumos que son adquiridos en el exterior para producir bienes o servicios que adquieren las familias. 

¿Es el momento para comprar dólares? Como toda mercancía, si está barata, vale la pena adquirirla, sin embargo, la conveniencia de comprar o no dólares depende de nuestra capacidad de compra y del uso que les queramos dar. 

Por ejemplo, las empresas que tengan deuda en dólares es muy probable que tomen la oportunidad para cubrir el pago de sus compromisos financieros, si es que cuentan con dichos recursos en un momento tan difícil por el que están atravesando. 

En el caso de las familias, si tienen planeado o la necesidad de realizar un viaje al extranjero, también es muy probable que les convenga adquirir dólares cuando el tipo de cambio tiende a abaratarse. 

Lo importante ahora es saber si el dólar seguirá bajando conforme mejoren las expectativas del futuro económico a nivel global o si ya tocó piso o tienda a repuntar. 

Esta es una cuestión difícil de responder, ya que eso va a depender de que se regrese a una situación de mayor estabilidad, sin embargo, el riesgo de un repunte de los contagios sigue gravitando en economías como la estadounidense y la europea, lo que haría más difícil y larga la recuperación. 

En síntesis, especular con el tipo de cambio en estos momentos de alta volatilidad en los mercados internacionales, puede ser arriesgado, por lo que se recomienda siempre estar lo mejor informado y no poner en riesgo, si no hay necesidad, los recursos con que cuenta las empresas y los hogares en medio de la crisis por la que estamos atravesando.