El Barcelona y el Atlético de Madrid empataron a cero en el duelo de la jornada 35 de la Liga Santander. A la espera del partido entre el Real Madrid y el Sevilla (este domingo), nada cambió en lo más alto de la tabla.
El equipo de Simeone conserva el primer puesto y el Barça queda en la tercera posición, a dos puntos del líder. Nadie se sorprendió en el Camp Nou. Simeone sabía que el Barcelona quería la pelota y Koeman que el Atlético prefería los espacios.
El dilema estaba en qué equipo dominaría el partido, sobre todos las áreas. Y, de arranque, el Atlético impuso su fútbol. El conjunto rojiblanco, en la primera mitad, intentó nueve remates (seis a portería), ninguno con éxito.
La mala puntería del Atlético coincidió con la del Barça. En las tres oportunidades que tuvieron los azulgrana, no pudieron con Oblak. A Koeman no le convencía lo que estaba pasando y en el entretiempo mandó al campo a Araujo en lugar de Mingueza, fue su segundo cambio después de que Ilaix reemplazara al lesionado Busquets. Pero el duelo no cambió de guion.
Sí, en cambio, fue mermando en intensidad. Y eso perjudicó al juego del Atlético.
El Barcelona estaba demasiado pendiente de Messi en ataque, mientras que el Atlético, más coral, repetía su falta de puntería en las pocas oportunidades que tuvo en la segunda parte.
El partido apagó en el Camp Nou y nada cambió en lo más alto de la tabla. Por ahora.