Crisis, amenaza latente: Unicef Preocupante desnutrición, la sed y la enfermedad
No cede hambre en millones de niños
Crisis, amenaza latente: Unicef Preocupante desnutrición, la sed y la enfermedad
Nueva York, N.Y. La desnutrición, la sed y la enfermedad continúan amenazando la vida de millones de niños en el noreste de Nigeria, Somalia, Sudán del Sur y Yemen, pese a que la hambruna haya terminado en territorio sursudanés, según el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef). En un comunicado emitido este viernes, el Unicef destacó que la declaración del final de la hambruna en dos condados de Sudán del Sur no debe distraer del hecho de que continúa una grave inseguridad alimentaria en Nigeria, Somalia y Yemen, lo que amenaza la vida de millones de niños. “No hay lugar para la complacencia. Mientras la hambruna se ha contenido en Sudán del Sur, la vida de millones de niños todavía pende de un hilo”, aseveró el director de Programas de emergencia de Unicef, Manuel Fontaine. Añadió que la crisis en esos países está lejos de terminar, por lo que la comunidad humanitaria debe ampliar su respuesta e insistir en el acceso incondicional a la ayuda. Añadió que, de lo contrario, “los progresos realizados podrían ser rápidamente revertidos”. En los cuatro países, la situación sigue siendo motivo de gran preocupación y el número de niños en riesgo inminente de muerte sigue siendo alarmante, destacó Unicef. En el noreste de Nigeria, la violencia del grupo extremista de Boko Haram sigue contribuyendo al desplazamiento de la población a gran escala, limita la actividad comercial y restringe los medios de vida normales. En esa zona de Nigeria, alrededor de 5.2 millones de personas padecen de una severa inseguridad alimentaria, con 450 mil niños con grave desnutrición aguda durante este año. En Somalia, una población frágil, agobiada por décadas de conflicto, ha quedado más expuesta por las prolongadas condiciones de sequía. Se calcula que durante 2017 unos 275 mil niños sufrirán de desnutrición aguda grave, lo que los hace nueve veces más propensos a morir de enfermedades mortales como el cólera, la diarrea aguda y el sarampión, que se propagan por todo el país. En Sudán del Sur, el número de personas que lucha por encontrar suficiente comida cada día ha aumentado a seis millones, el nivel más alto de inseguridad alimentaria que se haya experimentado en ese país. Este año, se calcula que casi 276 mil niños sufren de malnutrición grave y necesitan ayuda inmediata para salvar vidas, pese a que el estado de hambruna fue declarado esta semana como finalizado. En Yemen, donde se calcula que hay casi 400 mil niños gravemente desnutridos, un brote de cólera sin precedentes, con más de 175 mil casos posibles y más de mil muertos hasta la fecha, ha complicado la respuesta humanitaria en curso, puntualizó Unicef.