Vecinos de la colonia Hijos de Ejidatarios, deben soportar el influyentismo de mecánicos y camioneros, que aparcan sobre el área verde de ese asentamiento y además la usan de pensión.
Dejada en manos que particulares con intereses económicos, ese espacio que se planeo como un sitio de recreo familiar, ahora es propiedad “privada” de quienes dejan tracto-camiones chatarra, remolques, basura y neumáticos de desecho.
Lejos de ofrecer un espacio para niños, jóvenes y familias en general el área verde es un yermo en donde impera la ley del más fuerte.
Los pequeños o jóvenes que buscan jugar algún deporte o ejercitarse ni por asomo se paran por ahí, ente el temor de ser corridos por los “dueños” de ese espacio que se supone es de uso común.
Llantas de desecho y basura “adornan” lo que debería ser un área de recreo.