Los muertos son primero

Acuden a los panteones aprovechando que algunos no tienen barda y otros sufren caído de los tendidos o blocks

Familias aprovecharon que el panteón municipal, San Pedro, ubicado en la colonia Arcoíris no tiene barda en la parte de atrás, ni en los costados, para entrar y visitar las tumbas de sus difuntos, pese a la prohibición de las autoridades ante la pandemia.

En la parte de enfrente, el acceso estaba cerrado y con candado, y los floristas a los costados ofreciendo coronas y flores.

Pero en la parte de atrás del panteón no hay barda, ni en algunos costados, por lo que las familias arribaron desde temprano para limpiar las tumbas, colocar flores y realizar algunos rezos.

Las familias también llevaron comida y algunas cervezas para degustar a un lado de las tumbas de sus seres queridos.

Las autoridades estatales determinaron mantener cerrados los panteones ante el alza de casos del Covid-19, pero los ciudadanos no hicieron caso y aprovecharon para entrar por la parte de atrás.

No hubo gran cantidad de personas, pero si acudieron constantemente a dejar las flores y alimentos para sus deudos.

Pese al reiterado llamado de las autoridades estatales y locales, los ciudadanos salieron este 31 de octubre a pedir Halloween con los pequeños y también salieron este 01 y 02 de noviembre para visitar las tumbas de sus familiares, en medio de una pandemia que no ha terminado y de la cual todavía no hay vacuna.

SE INFILTRAN

Ayer, hubo personas que lograron su propósito de entrar al panteón municipal Sagrado Corazón de Jesús aprovechando los huecos que había en una parte de la cerca trasera y burlando la vigilancia que realizaban empleados del sitio.

Un hombre del que dijeron se había brincado la barda de block que hay en la parte lateral junto al parque de béisbol Adolfo López Mateos, pasó tranquilamente a dejar flores a una de las tumbas.

Por otro lado, un par de mujeres fueron vistas también en el interior del lugar y reconocieron que habían cometido un error al entrar ahí pero argumentaron que lo habían hecho porque andaban buscando a un marmolero que trabaja precisamente en el camposanto a quien le habían encargado un trabajo para una sepultura donde yace el cuerpo de uno de sus familiares.

También se dieron casos en que vecinos cuyos patios comunican directamente con el cementerio, que permitían la entrada al lugar y para ello tan sólo les pedían ‘para las cocas’.

Cierran con palos y ramas

 Es por el callejón Panteones donde están ubicadas varias viviendas y en donde se venían presentando las referidas anomalías.

 Personal del Sagrado Corazón de Jesús realiza rondines a lo largo de la cerca para evitar que el internamiento de personas continúe registrándose y uno de los tramos fue ‘cerrado’ con palos y ramas.

 La única puerta que hay en el cementerio permanece cerrada y se abre solamente cuando sepultan un cadáver.


Las familias aprovecharon la parte de atrás del panteón San Pedro para entrar y honrar a sus seres queridos.