Después de tres días de haberse visto totalmente solitaria la calle peatonal Hidalgo y los negocios existentes, a uno y otro lado de la misma, volvieron a cobrar vida.
"A raíz de las fuertes lluvias que trajo consigo la tormenta tropical Alberto, la gente se resguardó en sus casas y no salió más que para comprar alimentos para la elaboración de desayunos, comidas y cenas; pero a partir de ayer ya empezó a registrarse movimiento de personas en esta arteria y otras más", dijo Raúl Gerardo Cisneros Villarreal, representante de los comerciantes del céntrico sector.
De no presentarse más meteoros como el que recién azotó a Reynosa u otro peor, empezarán a repuntar las ventas en los negocios, sobre todo porque por estos días continuarán las ceremonias de graduación en las escuelas de distinto nivel que operan en la ciudad, desde pre primarias hasta las universidades.
Durante los días que prevalecieron las precipitaciones pluviales, las ventas disminuyeron hasta en un 90%, pero de ahora en adelante, si no se presenta contratiempo alguno, irá incrementándose la actividad comercial al paso de los días y las semanas, apuntó finalmente Cisneros Villarreal.