“Me animé para ejemplo de mis hijos, que deben de estudiar, porque como quiera lo necesita uno, aunque esté grande uno puede ponerles el ejemplo”, dijo Juan Sierra López, de 44 años de edad que logró terminar su secundaria.
Juan recibió de manos de las autoridades del ITEA su certificado muy emocionado, porque no fue fácil.
Recuerda que no estudió porque acompañaba a su padre por todo el país, porque era camionero y ya cuando quiso estudiar ya estaba grande.
El originario de Puebla señala que quiere ser ejemplo para sus hijos y su nieta, por lo que al terminar su primaria pudo entrar al Ejército y en ocho meses estudió la secundaria.
“Tenía como 14 años cuando hice la primaria y me animé para ejemplo de mis hijos que deben de estudiar, porque como quiera lo necesita uno, aunque esté grande uno puede ponerles el ejemplo, porque a donde quiera que va uno, en las maquilas, en los restaurantes, donde vaya uno, le piden de perdido leer y escribir, y si tiene su certificado qué mejor”, dijo.
Señaló que llegó hace 17 años a Reynosa y que sus hijos de igual forma estudian la escuela abierta.
“No es fácil, pero se siente muy bonito y se siente la motivación”, dijo mientras portaba su toga y birrete.
Juan ha trabajado de albañil, cocinero, mecánico y chofer y piden a los jóvenes y adultos que no se rindan y terminen su educación básica. “Que le echen ganas, que se sientan orgullosos porque donde se paren por su certificado, son recibidos y que siempre sigan sus metas y aprendan muchos trabajos, porque a veces de uno no se puede vivir”, recalcó. Agradeció a todo el equipo ITEA, por apoyarlos e impulsarlos.