El Mañana / Staff.- Las obras que se realizan en el primer cuadro de la ciudad han generado molestia en diferentes sectores del comercio y el turismo, sin embargo, poca atención se ha puesto los boleros de la plaza principal Miguel Hidalgo, quienes desde el inicio de los trabajos en el mes de julio han reportado una baja en sus ingresos de hasta el 70 por ciento.
Y es que a decir los trabajadores en este oficio, haber limitado el acceso de los vehículos a la plaza principal ha generado que los clientes habituales dejen de acudir a lustrar su calzado generado un severo golpe a sus finanzas.
"Ha bajado yo creo como de un 40 a un 70 por ciento, no creas que nos vamos con la gran cosa, cuando mucho unas 3 o 4 boleaditas" comentó uno de los boleros conocido como Chóforo, quien además enfrenta una discapacidad en sus piernas.
Agregó que algunos de sus compañeros fueron beneficiados con una ayuda económica de 5 mil pesos por parte de autoridades municipales, sin embargo, no todos pudieron acceder a este apoyo al no contar con cierta documentación que les fue requerida.
"Como pidieron papeles pues nos les dieron a todos, les dieron 5 mil pesos, pero lo que pasa es que no todos tenemos los papeles en regla" explicó. Hay quienes ante la difícil situación buscan otras formas de generar ingresos, sin descuidar el oficio que a lo largo de su vida ha sido su principal fuente de sustento.
"De repente nos dan un periódico, hay tengo ya preparado un ´bonchesito´ y cuando no hay nada me voy allá donde están las piñatas y lo vendo, hay lo que me den es bueno" dijo el señor Manuel, quien dice darse por satisfecho cuando por lo menos obtiene para el pasaje del siguiente día.
"Ya con que salga para la pesera de mañana ya es ganancia" agregó.
Son pocos los boleros que han resistido la crisis generada por las obras de remodelación en los alrededores de la plaza principal, trabajos que según autoridades terminarán a finales del mes de octubre.
Mientras tanto, los boleros de la plaza principal hacen un llamado a la población para que no se olviden de ellos y de vez en cuando acudan a lustrar su calzado, confiando en recibir un servicio de calidad avalado por décadas de experiencia y al mismo tiempo ayudar a la economía familiar de estos artistas del brillo y el cuidado del calzado.