Dadas las altas temperaturas que han venido registrándose en las últimas fechas, el interior de los domicilios se convirtieron prácticamente en unos hornos, según una ama de casa que solamente se identificó como Esthela, que vive en la calle Madero con Javier Mina, zona Centro.
La suspensión del servicio de energía eléctrica inició alrededor de las dos de la madrugada y regresó la luz hasta casi las seis de la mañana.
Se supo que hubo vehículos y cuadrillas de la CFE trabajando en calles como la Juárez, así como en la Madero, pero se ignora cuál haya sido realmente la causa del apagón.
Mientras se resolvía el problema, la gente sufría por la falta del servicio, porque el calor que se sentía al interior de las casas era realmente insoportable, al grado de que algunas madres y padres de familia tuvieron que dormir en los patios.
Los negocios ubicados por el sector, incluidas algunas tiendas de conveniencia, también tuvieron que esperar a que llegara la luz para poder iniciar labores.
Lamentablemente, ninguna autoridad de la Federal de Electricidad da explicaciones a las familias y comerciantes afectados sobre qué originó el apagón, señaló la madre de familia.
Afortunadamente, en mi caso, agregó, no hubo desperfecto alguno en los aparatos electrodomésticos de la casa, pero la CFE debiera mejorar el servicio, brindar el mantenimiento preventivo y correctivo oportunamente para evitar situaciones como la que afectó esta vez a muchos residentes del centro de la ciudad.
La repentina suspensión de luz duró casi cuatro horas y afectó a cientos de familias y negocios del sector centro.