Menos de la mitad de las mujeres son comerciantes adheridas a la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Reynosa y aún persiste el temor entre las féminas de iniciar un negocio o ser empresarias, porque muchas veces es como una guerra de obstáculos ante la tramitología y la desinformación.
La Canaco local tiene entre un 35 a 40 por ciento de mujeres que son comerciantes, que pagan impuestos y son establecidas.
Erika Banda Bermúdez, vicepresidenta de Mujeres Empresarias de Canaco, comentó que hay muchas que tienen negocios, que les va bien, pero son informales, y que pueden tener mayores expectativas si están mejor informadas y capacitadas para llevar adecuada contabilidad y trabajar en temas de fiscalización.
“Hay muchos tabúes, formas que dicen ‘voy a trabajar más para el gobierno, para hacienda, me van a quitar todo; si pido un crédito al banco me van a quitar mi casa’; mucha desinformación, muchas creencias que se arrastran por generaciones y que perjudican mucho el crecimiento; hay mujeres sumamente talentosas, pero que no crecen”, dijo.
Señaló que hay incremento grande de mujeres emprendedoras en diversos rubros, pero no al mismo margen que crecer dentro la formalidad.
La vicepresidenta de Mujeres Empresarias de Canaco explicó que se requiere del apoyo de las autoridades para que el panorama sea más favorecedor, independientemente de todas las actividades que tiene este sector femenil como responsabilidad.
“Quieres una cita para darte de alta y te la dan en dos, tres meses; piden mucha documentación. Creo que lo pudiera favorecer es que haya un esquema más simplificado para que las mujeres se atrevan y que no vean como una guerra de obstáculos que tienes que pasar”, expresó.
NO PIENSAN IGUALBandas Bermúdez comentó que lo primero es que la mujer se capacite, porque muchas veces hay desinformación de hasta cómo abrir una cuenta de banco, cómo acudir a Hacienda o cómo hacer un contrato que te sea favorecedor, por lo que Canaco da asesorías; incluso, hay una plataforma donde se puede acceder a cursos, conferencias y más. “Todas las barreras y creencias, limitantes culturales y que regionalmente nos impide pensar igual que la mujer de Nuevo León, es una forma de trabajar local, que tome valor de animarse y tomar un riesgo; el mayor riesgo es no tomar riesgo”, recalcó.
Señaló que se busca generar interés entre las mujeres con gestión emocional, donde se aprende a que no todo sale a la primera y que hay más mujeres en la misma circunstancia, por lo que es importante complementar y prepararla para que pueda sobrellevar todos los retos. “El desánimo, la depresión, el desengaño, el desencuentro con un montón de circunstancias es fuerte, y seguir adelante vale mucho la pena a través de esa preparación emocional”, finalizó.
Trabas- La vicepresidenta de Mujeres Empresarias de Canaco explicó que se requiere del apoyo de las autoridades para que el panorama sea más favorecedor, independientemente de todas las actividades que tiene la mujer como responsabilidad.
- “Quieres una cita para darte de alta y te la dan en dos, tres meses; piden mucha documentación. Creo que lo pudiera favorecer es que haya un esquema más simplificado para que las mujeres se atrevan y que no vean como una guerra de obstáculos que tienes que pasar”, dijo Erika Banda Bermúdez.