La laguna “La Escondida” cuenta con una extensión de superficie de 230 hectáreas y es bordeada por al menos 30 colonias, además de estar asentada -ahora recuperada-, tras un proceso de saneamiento en las inmediaciones del Parque Cultural de Reynosa.
Desde 1997 es una reserva ecológica protegida, al ser espacio natural de albergue de aves migratorias del norte de los Estados Unidos y Canadá, así como fuente de vida para muchas especies marinas y silvestres.
Hoy se encuentra en un lento proceso de invasión del lirio acuático, el mismo que ya se cobró como víctimas al canal Anzaldúas y al dren El Anhelo.
El lirio acuático ya ocupa extensiones de la antes prístina laguna “La Escondida”, que después de mucho tiempo de abandono y olvido volvió a ser recuperada y declarada hace un cuarto de siglo como reserva ecológica protegida.