De nada sirvieron los llamados de auxilio hechos por ejidatarios de Reynosa para que alguna autoridad mejorara las brechas, pues están igual o peor de intransitables que antes y eso complicará el traslado de camiones cargados de grano de los centros de producción a los de recepción.
No hubo respuesta de parte de dependencia alguna de ningún nivel, por lo que los campesinos y agricultores deberán sortear los riesgos que implica el mal estado de los caminos vecinales, una vez iniciadas las trillas de las cosechas.
El delegado municipal del sector agrario en Reynosa, Mauro Rodríguez, dijo que las brechas ‘están hechas garras’.
Hizo un exhorto a autoridades diversas, pero no hubo respuesta para emprender un programa emergente de nivelación de las brechas.
Esto hubiera facilitado la movilización de las cosechas, pero como no hubo mejora alguna, los choferes de los camiones deberán extremar cuidados para evitar algún accidente que pueda derramar el grano que transportan.
Por un lado los productores sociales aseguran que los caminos vecinales están en muy mal estado. Por su parte, los propietarios rurales señalan que bien pueden sacar sus cosechas sin mayor problema.