El Mañana / Staff
“La canasta básica cada día está más cara y ya ni agua de limón podemos tomar, porque está carísimo, incluso el chile serrano, tomate, plátano, aceite comestible, entre otros alimentos más que son fundamentales en la dieta de las familias obreras”.
Trabajadores del Sindicato de Aplicadores de Impermeabilizantes, Anticorrosivos, Pinturas y Derivados del Petróleo demandan, por tanto, que el gobierno ponga freno a la carrera alcista de alimentos, porque ya hay muchas cosas que han quedado fuera del alcance del bolsillo de quienes perciben un salario mínimo.
Rigoberto Salinas lamentó que no hayan habido intervenir las autoridades federales para poner un hasta aquí a la carestía de los comestibles.
Muchos son los alimentos que por su precio son difíciles de comprar por parte de quienes no cuentan con suficientes recursos para ello, y son, precisamente los obreros, los que más sufren cada semana o quincena para poder adquirir lo necesario para alimentar a sus familias.
Al referirse a los pactos celebrados por el Gobierno federal para frenar el encarecimiento de los comestibles, dijo que todos fracasaron y por tanto cada vez suben más los precios de lo que se necesita en los hogares.