Reynosa se vistió de color y tradición para conmemorar el Día de Muertos, una de las festividades más emblemáticas de México.
Este año, la celebración demostró el gran júbilo, atrayendo a miles de reynosenses a los panteones, como el "Sagrado Corazón" y el "Guadalupano", donde flores y velas adornaron las tumbas de los fieles difuntos.
Desde temprano las familias comenzaron a llegar con coloridos arreglos de cempasúchil, un símbolo de esta festividad, donde el ambiente se llenó de aromas y colores, mientras las personas se disponían a embellecer las tumbas de sus seres queridos.
Familia coloca altar en el sepulcro donde descansa un joven.