El mal clima ha afectado las ventas durante esta temporada vacacional en la Central de Abastos, pero los locatarios mantienen la esperanza de cerrar con una derrama económica similar a la del año pasado.
La lluvia y la baja temperatura presente durante la Semana Santa hicieron que se ahuyentara a los consumidores y que se quedaran en casa.
Santiago González Cavazos, vocero de la Central de Abastos, comentó que se registró una baja considerable de alrededor de un 20 a 30 por ciento en general en la cuestión de productos y servicios.
“La actividad económica se vio afectada por la cuestión climática, no hubo el auge comercial que esperábamos; aunque no somos una ciudad turística, pero siempre hay algo más de movimiento, pero la cuestión climática tuvo un efecto muy fuerte”, dijo.
Los locatarios de la Central de Abastos mantienen la esperanza que durante esta última semana de vacaciones se pueda generar un repunte.
Esta temporada vacacional se prevé sea similar al año pasado, que se iba saliendo de las restricciones por la pandemia y se empezaba a reactivar la economía.
“Esperamos recuperarnos un poco de la Semana Santa; podemos estar hablando de un 30 por ciento arriba, comparado con el año pasado; sería muy similar”, recalcó.