Campesinos de Reynosa se benefician con las lluvias que se presentan en la región, pero les preocupa que ante la posible llegada de huracanes fuertes precipitaciones o granizo estén sin un seguro catastrófico "a la buena de Dios".
Mauro Barrera Martínez, delegado del Comité Campesino comentó que el año pasado las lluvias y la caída de granizo destrozaron la siembra de temporal para el lado de Río Bravo y parte de Reynosa. Con el granizo, en el área del ejido Periquitos, todo fue un desastre, ya que se afectaron 1,500 hectáreas y por el lado de Río Bravo de 6 a 7 mil hectáreas. "Hemos seguido insistiendo en un seguro que beneficiaría un desastre y poniéndoles sobre la mesa la situación con tiempo, para no llegar a la hora a decir ´No nos alcanzó el tiempo´; estamos en tiempo favorable, porque los seguros catastróficos se compran en noviembre", dijo.