El 5 de agosto del 2021 quedará grabado para siempre en Ronaldo González y su familia. Es la fecha que marcó el tan anhelado debut del futbolista reynosense en Primera División y se dio en el arranque de la jornada 3 de la Liga Mx. Su equipo, los Gallos Blancos del Querétaro cayeron en casa 0-1 ante el León pero Ronaldo disfrutó enormemente los poco más de 15 minutos que jugó.
“Pues la verdad tiene un significado especial, le batallé mucho, pero lo logré y le doy gracias a Dios, por siempre estar de mi lado y ayudarme a levantarme cuando todo parecía perdido, a mis padres que son lo que más amo en esta vida porque ellos creyeron en mi desde que esto comenzaba, cuando era un niño que soñaba con jugar en Primera División. A mi novia, a mi familia, amigos y conocidos por siempre apoyarme y a los que no lo hicieron también, por último pero no menos importante a mi, por sacrificar tantas cosas, por nunca rendirme, por ser constante y disciplinado en todo momento”, comentó el jugador en exclusiva para EL MAÑANA.
Héctor Altamirano le dio la oportunidad en un partido bravo que ya estaban perdiendo. Corría el minuto 75 cuando se encendió el pizarrón electrónico señalando el ingreso de “Rony” con el número 28. El momento que tanto había soñado ya era una realidad a sus 21 años con 10 meses y 14 días de edad.
“Bueno pues estaba muy emocionado, con muchas ganas de entrar, la verdad es que por mi mente no pasó nada en ese instante, eso llegó después cuando estaba ya en casa descansando y me vino a la mente todo lo que me tocó pasar para vivir ese momento”, explicó el mediocampista tamaulipeco quien fue utilizado como segundo contención aunque sus condiciones naturales son más ofensivas.
La euforia ya pasó. El objetivo se cumplió, sin embargo, ahora viene lo más complicado, mantenerse y forjar una carrera en el máximo circuito.
“Pues la verdad que no pienso mucho a futuro, ahora sólo estoy enfocado en seguir teniendo minutos, ser constante en el cuadro titular y ganarme la confianza del entrenador”, finalizó.