Javier Solís, agricultor y productor de aves de corral del poblado de Villarreales, dijo que las lluvias que se han presentado en la región Ribereña, son de mucho beneficio para agricultores y ganaderos.
Agregó que el agua de lluvia será muy buena para trabajar la tierra ya que la suaviza, facilitando las labores de la maquinaria que se utiliza para la preparación de las superficies agrícolas, evitando descomposturas y reduciendo el gasto de diésel.
“Muchos productores ya tienen sus tierras roturadas, y al dar punto la tierra podrán realizar las labores de bordeo y otras para completar los trabajos en sus tierras durante el mes de noviembre, garantizando un buen invierno para dar inicio al nuevo ciclo agrícola en el mes de diciembre con la aplicación del primer riego de asiento”.
Menciono que en base a la información de funcionarios de los módulos, saben que se cuenta con el agua suficiente y estas precipitaciones permiten más captaciones por lo que tendrán más agua en el siguiente ciclo agrícola, lo que les hace renacer la confianza en que los agricultores tendrán un buen año.
Remarcó que el agua es muy buena también para los productores de ganado, ya que las lluvias permiten la recuperación de las presas y el crecimiento de los pastos por lo que el ganado tendrá el alimento asegurado durante el invierno.