Ciudad de México.
La presencia de los nacidos en América Latina es de suma importancia para las Grandes Ligas al ser la segunda región, después de Estados Unidos, en aportar talento por lo que no es casualidad que los dominicanos Gary Sánchez (NY Yankees), Carlos Santana (Cleveland), Jorge Polanco (Minnesota) y Ketel Marte (Arizona), así como los venezolanos Wilson Contreras (Cachorros de Chicago) y Ronald Acuña (Atlanta) y el boricua Javier Báez (Cachorros de Chicago), integren esa lista.
Cada año, los equipos de Estados Unidos gastan millones de dólares en contratos destinados al talento latino. Desde muy temprana edad, algunos jugadores son firmados y llevados a sucursales donde se pulen y poco a poco a construyen una historia llena de éxitos.
Sin embargo, no todos los beisbolistas prosperan pese a tener todo a su favor.
¿Qué determina la consolidación de los latinos en las GL? La constancia, la disciplina y, quizá, un toque de suerte. (Reforma)
A paso seguro
Aunque el apellido de los Arano pudo haber sido el trampolín para dar el salto calidad con los Filis de Filadelfia, el pitcher, Víctor Arano, prefirió avanzar a su paso y ganarse la titularidad con sus buenas actuaciones.
En 2014, Víctor fue firmado por los Filis pero fue enviado a Clearwater Threshers, equipo de las menores con el que estuvo a punto de ser considerado Novato del Año pero, su falta de continuidad le restó votos.
El veracruzano permaneció en Clearwater hasta 2017, año en que Filadelfia seleccionó su contrato y lo debutó la noche del 12 de septiembre.
A la fecha, registra 72 juegos en Grandes Ligas y suma 74 ponches.
¿Cuál es principalobstáculo al quete enfrentas en EU?
"Es un poco difícil porque es otro país, y para ganarte un puesto en Estados Unidos debes de echarle muchas ganas para que te den esa oportunidad de llegar a Grandes Ligas".
¿Cómo logras dar el paso y mantenerte?
"Se necesita de mucha disciplina en el entrenamiento, en los juegos, hacerle caso a los coaches".
Con la candela apagada
El pitcher dominicano Deuris Severino tuvo la fortuna de ser firmado por los Cachorros de Chicago a la corta edad de 17 años.
De 2009 a 2011 jugó en la Liga Dominicana de Verano de los Cubs y se perfilaba para las mayores, sin embargo, una fuerte apendicitis, que lo dejó inactivo por varias semanas, le costó su lugar, su contrato.
Ahora, Deuris trabaja de forma independiente con los Tigres de Licey.
¿Qué es más difícil, llegar o irse con las manos vacías?
"Cuando me firmaron fue una experiencia muy importante para mí, no sólo económicamente, sino para toda mi preparación deportiva y el conocimiento que tuve todos esos años.
"(Dejar de jugar en la GL) fue un golpe muy duro, pero el deporte me ha enseñado que con cada golpe que recibo tengo que levantarme".
¿Cómo asimilar que un día eres prospecto y al otro ya no te contratan?
"(Lo asimilas) bien, yo estoy trabajando mucho y pasando por varios clubes. No me cierro a la posibilidad de volver algún día, porque la vida da muchas vueltas".
El futuro
El mañana de los Padres está en los brazos, guantes y bates latinoamericanos.
La organización de San Diego cuenta con, al menos, 30 prospectos que en cualquier momento podrían obtener la titularidad, uno de ellos es el tricolor Esteban Quiroz, que llegó a los frailes y fue ubicado en su filial Triple A, donde se mantiene activo para seguir adaptándose a las exigencias de la Gran Carpa.
¿Cuál es la fórmula para llegar a la titularidad?
"Como todo, la consistencia es la mejor arma para el pelotero y para cualquier deporte, ya que vienen muchos jugadores que están abajo despuntando y cada vez se pone más difícil la competencia".
En 2016, los frailes pagaron 1,5 millones de dólares por el tijuanense Tirso Ornelas, quien a sus 18 años llegó con la encomienda de ser un referente tricolor en las Grandes Ligas.
¿Cómo aprendes a mentalizarte para triunfar lejos de casa?
"Eso se aprende conforme uno va avanzando y pasando el tiempo uno va madurando y, como lo dije antes, es un sacrificio que ellos y yo sabemos que hay que pasar".