En sólo una semana, la Ciudad de México y Estado de México demostraron su importancia para la taquilla cinematográfica.
Del 1 al 7 de marzo, ya con los cines abiertos en ambas entidades, se contabilizaron 400 mil boletos vendidos, contra los 300 mil apuntados durante la última semana de febrero.
Es decir, uno de cada cuatro boletos vendidos se quedaron en dos lugares, cifra que pudo ser mayor, pero la cadena Cinemex, la segunda más grande el país, permanecerá, por decisión propia, con la cortina bajada al menos por dos meses más.
En este contexto las autoridades capitalinas permitirán que las salas crezcan su aforo de 20% a 30% al bajar contagios de la Covid-19.
Tendrá el mismo horario hasta ahora, por lo que su última función comenzaría a las 20:00 horas.
El pasado 1 de marzo, mismo día en que reabrieron los cines tras casi tres meses cerrados, la Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica pidió a las autoridades reconsideraran el aforo permitido.
“Teniendo en consideración la evidencia científica que las salas de cines son espacios seguros, incluso más seguros que otros giros a los que se les ha autorizado un mayor porcentaje de aforo e incluso un horario de operación max extenso”, indicó la Canacine en un comunicado.
Entre la Ciudad de México y la entidad mexiquense se abrieron 980 salas, de un total de mil 635. Tradicionalmente la pura capital nacional aporta 30% de boletos anuales vendidos.