La atmósfera de la Tierra, que hoy es rica en oxígeno y permite la vida, podría cambiar dentro unos mil millones de años, con un predominio de metano y bajos niveles de oxígeno, que recordaría a cómo era el planeta en sus inicios, según un estudio que publica este miércoles Nature Geoscience.
La investigación, a cargo de la Universidad japonesa de Toho y la NASA, sugiere que el oxígeno atmosférico no es permanente en los mundos habitables, lo que tiene implicaciones para la búsqueda de vida en otros planetas similares a la Tierra.
Un indicador de posible vida planetaria es una atmósfera detectable y rica en oxígeno, como la que tiene ahora la Tierra, lo que sugiere la existencia de plantas y la fotosíntesis.
Sin embargo, el tiempo de vida de estas bioseñales basadas en el oxígeno de la atmósfera terrestre es incierto, sobre todo en un futuro lejano.
Por ello, el equipo modeló los sistemas de la Tierra, incluidos el clima, los procesos biológicos y geológicos, para examinar la escala temporal de las actuales condiciones atmosféricas en nuestro planeta.
El resultado fue que una atmósfera rica en oxígeno "probablemente persistirá durante otros mil millones de años", antes de que la rápida desoxigenación haga que recuerde a la de la Tierra antes del Gran Evento de Oxidación.
La atmósfera original de la Tierra contenía muy poco oxígeno, pero eso comenzó a cambiar hace unos 2 mil 500 millones de años cuando los niveles aumentaron durante la Gran Oxidación, que marcó un hito en la historia del planeta, pues permitió, con el paso de millones de años, el desarrollo de formas biológicas.
Los autores sugieren que la detección de oxígeno atmosférico en la Tierra podría ser posible sólo durante el 20 o el 30 % de la vida del planeta y consideran que la futura desoxigenación será "una consecuencia inevitable del aumento" de los flujos solares.
Si lo mismo ocurre en otros planetas, indica el estudio, entonces se necesitan biofirmas adicionales en la búsqueda de vida extraterrestre.