Irá a cárcel por impedir bodas gays

Un juez federal ordenó encarcelar a una empleada estatal de Kentucky que se niega a emitir licencias matrimoniales a parejas del mismo sexo.

Kentucky, Estados Unidos.La funcionaria, Kim Davis, del condado de Rowan, fue enviada a prisión después de comparecer ante el juez David L. Bunning en la Corte Federal.Se trata de una nueva derrota legal para Davis, quien argumentó que no debía ser obligada a emitir licencias que contradigan sus creencias religiosas.La Corte no puede perdonar la desobediencia de una orden legal, dijo el juez Bunning.Si se da a la gente la oportunidad de elegir qué leyes eligir, habrá problemas a largo plazo.Davis será liberada una vez acepte emitir las licencias matrimoniales que se le ordenaron.El lunes, la Corte Suprema rechazó la apelación de la funcionaria, en una decisión que, se esperaba, allanaría el camino para el matrimonio entre personas del mismo sexo en el condado de Rowan. Pero el martes, Davis y sus empleados volvieron a negarse.Poco después de que la oficina de licencias del condado de Rowan abrió, la empleada les negó licencias a dos parejas en razón de sus creencias religiosas y la autoridad de Dios.El juez Bunning dijo que su única alternativa era encarcelarla porque no cree que fuera a cumplir su orden, incluso si se le imponía una multa.Davis salió del juzgado acompañada de un agente, pero no esposada, antes de ser puesta en custodia del servicio federal de alguaciles.Cientos de personas al exterior de la corte gritaron y cantaron: ¡Ganó el amor! ¡Ganó el amor!.Kim Davis testificó durante unos 20 minutos y se mostró muy emotiva. Describió cómo se convirtió en cristiana y dijo que es incapaz de creer en otra cosa.April Miller, una de las mujeres que intenta obtener licencia, también presentó testimonio. Dijo que había votado por Kim Davis en las elecciones, y que su presencia ahí se debía únicamente a la obtención de su licencia y no para intentar cambiar sus creencias.Frente a la corte federal, varios manifestantes se gritaron unos a otros, entonaron himnos y ondearon letreros que iban desde lo violento (Volteen hacia Jesús o ardan) a las muestras más sencillas de apoyo.Un pequeño avión sobrevoló el juzgado con un letrero colgando con la leyenda Kim, mantente firme.