Más de 7 mil maestros de Reynosa, entre activos y jubilados continúan a la espera de que el gobierno federal aterrice una nueva campaña de vacunación contra el Covid-19, que les permita reforzar el antídoto CanSino que les fue suministrado en abril.
La petición va enfocada también a que la nueva dosis sea reconocida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), para que se deje libre tránsito a quienes buscan cruzar hacía el Valle de Texas u otras zonas de Estados Unidos.
Desde lo local, el secretario de organización del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) en la sección 30, evidenció la tardanza. “Seguimos esperando un refuerzo a la vacuna que recibimos los maestros, las peticiones ya están hechas, el fabricante (CanSino) expuso que es necesario después de los seis meses, y estos ya pasaron, aún no hay nada en concreto, hay una exposición continua porque ya estamos frente a grupo, en esta pandemia el magisterio se ha visto afectado, así que seguiremos insistiendo”, comentó Jorge Guadalupe Acuña Tobias.
Las marcas de vacuna CanSino y Sputnik contra el Covid-19 no son autorizadas por el gobierno de Estados Unidos para viajar, y por ello el magisterio ha recurrido a combinar dosis de Pfizer o Aztra Zeneca para ser admitidos.
A lo que el representante del SNTE agregó: “Queremos que las autoridades sanitarias nos digan qué marca nos corresponde, los docentes aceptaremos porque nos interesa la salud, pero lo ideal es que si sea una de las aprobadas por la OMS, hay compañeros que necesitan ir y venir de Estados Unidos por diversas cuestiones”.
Los maestros de Reynosa fueron los primeros en ser inmunizados contra el coronavirus como parte de un plan federal de regreso a clases, que también abarcó a personal de apoyo, administrativo y de dirección.
Por ello la lista de quienes esperan es superior a los 7 mil registrados ante el SNTE.