IMPARTEN JUSTICIA

Los ampáyers de beisbol y softbol Carlos Lio, Julio César Quiroz y Felipe Palacios platican las grandes satisfacciones que les ha dejado esta profesión pero también externaron su lado oscuro

La mesa más famosa del deporte en Reynosa estuvo nuevamente de manteles largos al presentar una edición más de la gustada sección “Miércoles de Invitado” del programa EL MAÑANA Deportes, en la que ha tenido deportistas de talla local, estatal y nacional, pero ahora fue turno de los hombres que imparten justicia sobre los diamantes ya que sin ellos los partidos no se desarrollarían se trata de los umpires o “ampayitas”. La tercia de ampáyers, Carlos Lio, Julio César Quiroz y Felipe Palacios, que pertenecen a la agrupación “Umpires Independientes de Reynosa”, que está afiliada a la Asociación Estatal de Softbol de Tamaulipas, tiene un largo recorrido sobre el terreno de juego en las que cuentan con innumerables finales que han participado además de estar en eventos de índole estatal y nacional. “Me ha dejado grandes momentos gratos por todas las finales que he llevado a cabo y la satisfacción de salir bien del juego que no hubo problemas”, comentó Carlos con una sonrisa. Otro de los momentos gratos que han pasado es compartir un encuentro con jugadores profesionales que pertenecieron a los Broncos de Reynosa. “A mí no me toco ponchar a ninguno de ellos pero si marcarles muchos outs por regla y uno de mis clientes era el “Mosco“ Arredondo que se despegaba de las almohadillas antes que se hiciera el lanzamiento”, expresó con gusto Julio, que cuenta con 14 años de experiencia.   Sin duda una de las principales virtudes que debe tener cualquier ampáyer es la paciencia cada vez que se pone atrás del pentágono para soportar en ocasiones las constantes reclamaciones de los peloteros, motivo por el cual estos hombres se preparan mentalmente para hacer bien su trabajo y que sus decisiones no terminen por influir en la pizarra. Pese estar en buen estado físico son sabedores que un día el tiempo los va alcanzar y ya han comenzado a preparar a la nueva generación de ampáyer y es por eso que invitan al público en general que se unan a su agrupación para que crezca el número.