Santiago, Chile.
Cuando la pubertad, el enamoramiento y las hormonas aparezcan, la prioridad de Mike (Finn Wolfhard), Lucas (Caleb McLaughlin), Dustin (Gaten Matarazzo) y Will (Noah Schnapp) ya no será precisamente jugar Calabozos y Dragones.
Si a eso se le agrega que el Monstruo Mind Flayer (Azotamentes) o La Sombra regresará para aterrorizar al pueblo de Hawkins, Stranger Things 3 ya no se trata de un juego de niños.
PRIMER AMOR
La tercera temporada del show, disponible a partir de hoy jueves en Netflix, será más violenta, con escenas de acción, peleas y también con muchos momentos que involucran dejar atrás la niñez y madurar.
Mientras explora el primer amor con Mike, Eleven (Millie Bobby Brown) también experimentará la definición de su personalidad, de sus gustos y su transición de una niña que desconoce el mundo, a una adolescente con capacidad de decisión y poderes de telequinesia.
Porque esta entrega también aborda el sexismo, la misoginia y la desigualdad de géneros que imperaba en la década de los 80, especialmente por medio de Nancy (Natalia Dyer), quien vivirá los abusos de los hombres en su trabajo.
Conforme se acerque la celebración del 4 de julio (Día de la Independencia de Estados Unidos) de 1985, las cosas en el pueblo se tornarán más oscuras, lo que contrasta con el colorido e iluminado verano.
El Upside Down (El Otro Lado), y la amenaza de que alguien vuelva a abrir el portal que lo conecta al mundo real, volverá a ser el motivo para unir al la pandilla de amigos en Stranger Things... sólo que no es seguro que todos sobrevivan porque ya nada un juego de niños.