HONG KONG
Tong Ying-kit, de 24 años, fue condenado por terrorismo e incitar a la secesión. En un acto el 1 de julio de 2020 cargó con su moto contra un grupo de policías, portando una bandera con la consigna prohibida “Libertad a Hong Kong, revolución de nuestro tiempo”.
El gobierno del presidente Xi Jinping impuso la ley en la antigua colonia británica el año pasado luego de protestas que estallaron a mediados de 2019. Beijing ha anulado las libertades civiles de tipo occidental y busca aplastar el movimiento por la democracia, encarcelando a los activistas. Se ha reducido el papel de la ciudadanía en la elección de los legisladores.
Los detractores acusan a Beijing de violar la autonomía prometida tras la devolución del territorio a China en 1997 y destruir su estatus como centro empresario global. Los activistas por los derechos humanos dicen que se abusa de la ley de seguridad para atacar el disenso legítimo.
La condena de Tong fue más larga que los tres años solicitados por la fiscalía.
La condena es un “martillazo a la libertad de expresión” y demuestra que la ley es “una herramienta para inculcar el terror” en los críticos del gobierno, dijo la directora de Amnistía Internacional para la región Asia-Pacífico, Yamini Mishra, en un comunicado.
La ley “carece de exenciones para la expresión o protesta legítima”, dijo Mishra. “El veredicto no tuvo en cuenta los derechos de Tong a la libertad de expresión y protesta”.