HECHA EN TEXAS

Cumple su sueño de convertirse en profesional en el país de las barras y las estrellas

Me gustaría ser top ten algún día y ganar un Grand Slam”. , María José Portillo, tenista mexicana.. Ciudad de México. María José Portillo, tenista mexicana de 19 años de edad, dejó su natal Oaxaca a los 11 años para ir al país de las barras y las estrellas y cumplir su sueño de convertirte en profesional. Fue bastante difícil vivir sola, mi familia siempre ha sido muy unida, pero uno debe de hacer ese tipo de esfuerzos, hasta la fecha es muy difícil dejar a mis papás. Cuando llegué a la academia de Estados Unidos me vine sin saber inglés. Recuerdo que me trajo mi papá, estuvo conmigo dos semanas y me dijo bueno hija tienes que decidir ¿Te gusta, no te gusta? ¿Te vas o te quedas? Ha sido una de las decisiones más difíciles que he tenido que tomar, ha sido el reto más grande que he tenido, contó Portillo vía telefónica desde Texas. El año pasado logró su primer título profesional en Trinidad y Tobago y actualmente recibió un wild card para disputar la qualy del Abierto Mexicano de Tenis 2019, que se realizará en Acapulco del 25 de febrero al 2 de marzo. Voy por un muy buen camino, las oportunidades se me empiezan a dar, hemos hecho un buen trabajo mi entrenador, yo y mis padres. Me gustaría ser top ten algún día y ganar un Grand Slam, me gustaría ser la mejor tenista que pueda ser y tomado de la mano de ser mejor persona día a día, abundó la pupila del dominicano Michael Castillo. Es duro buscar billetes Michael Castillo hace milagros económicos para terminar la temporada con la tenista María José Portillo. El dominicano acentúa que la falta de apoyo económico por la que ha tenido que navegar es un obstáculo para el fogueo de la tenista oaxaqueña, que muchas veces se ha tenido que saltar la gira europea que le generaría un costo entre 12 mil a 15 mil dólares por 8 semanas. Esperamos tener la ayuda para así poder terminar el año y ver cómo resulta. Se necesitan dinero para cubrir el hospedaje, tratamos de hospedarnos en casas, si es un hotel tratamos de buscar uno barato y que sea seguro porque tengo mucha responsabilidad y tengo la confianza de los padres para cuidarla como mi vida. Muchas veces cocino para no salir a un restaurante, aviones económicos, a veces tardamos dos días en llegar a un destino al que se llega en un día. No tenemos la ayuda necesaria para poder tener un poco más de flexibilidad y hacer en cuanto a su etapa de formación, comentó Castillo vía telefónica desde Texas. Durante su etapa como juvenil María José contó con el apoyo económico del empresario mexicano Alfredo Harp.